El Concello de Nigrán suma desde la semana pasada un nuevo método para erradicar nidos de avispa velutina en la localidad. Se trata de una escopeta marcadora que dispara bolas biodegradables de veneno. Con este fin, el Concello invirtió un total de 2.860 euros en este artefacto idéntico al empleado en el popular juego de paintball y capaz de disparar a nidos de hasta 50 metros de altura.
La compra incluyó 1.000 "balas" especiales, que consisten en unas pequeñas bolas biodegradables rellenas de veneno que se deshacen en el interior del nido. Este método, estrenado con éxito en cuatro casos en Camos por el edil de Sanidad, Alfonso Vázquez, permite llegar sin dificultad a distancias donde la pértiga telescópica de 25 metros adquirida en el 2017 por el Concello no puede.
"Resulta un sistema rápido e eficaz para combater niños a partir de 10 metros de altura tendo en conta ademais a complexidade que conleva o uso da pértiga que, ademais, non chega a alturas tan elevadas", explica Vázquez, concelleiro y apicultor aficionado. "A tenacidade e voluntariedade de Álfonso Vázquez é a que explica que en Nigrán se estea a controlar e reducir a presenza da avispa asiática, a súa dilixencia fai que cada semana reciba directamente chamadas de veciños pese a tratarse dunha competencia autonómica e non municipal", explica el alcalde de Nigrán, Juan González.
Paralelamente a la eliminación, el Concello continúa repartiendo gratuitamente trampas de velutinas a todos los vecinos que así lo soliciten, siendo recomendable ponerlas entre los meses de marzo a junio, cuando finaliza la hibernación. Con este objetivo se adquirieron en este año 400 trampas, sumando así un total de 2.000 entregadas desde 2017.
Las trampas consisten en sencillos aparatos a los que se le incorpora un líquido atrayente a base de feromonas cada quince días, momento en el que se retiran todos los insectos capturados. También facilita la receta casera del atrayente, para el que es necesario 1 litro de vino tinto, 1 litro de cerveza, 1 kg de azúcar y un chorro de vinagre, todo conservado en un bote hermético.
"Desde marzo e ata xuño é cando resulta verdadeiramente efectivo poñer trampas nas árbores froiteiras ou zonas de flores porque e cando saen as raíñas da hibernación e a comer, en pleno verán xa non ten sentido porque están os niños construidos", explica Vázquez, quien llegó a contabilizar en una sola tarde 50 asiáticas capturadas en un aparato y durante toda la primavera 2.000 reinas en una docena de ellas. "Cada reina é un futuro niño, polo que as trampas evitan milleiros e milleiros". Así, según los expertos, asegurar la eliminación de la reina es el método más eficaz para su control, ya que evita la producción de nuevas reinas y la formación de colmenas, que pueden albergar hasta 2.000 ejemplares y 6.000 larvas.