La Xunta de Galicia ha concedido al Concello de O Porriño un millón de euros para las actuaciones de rehabilitación, a nivel de barrio, de la zona declarada ERRP (Entorno Residencial de Rehabilitación Programada) en Torneiros. Esta zona abarca una superficie total de 124.560 metros cuadrados, incluyendo 50 bloques de edificios, 15 en la Fase I, 7 en la Fase II, 23 en la Fase III, 4 en la Fase IV y 1 en la Fase V, y los viales y zonas libres que los rodean.
Estos fondos se enmarcan en el programa de ayudas financiado con fondos de la Unión Europea NextGenerationEU y permitirán al vecindario de los polígonos residenciales optar a ayudas para mejorar inmuebles, edificios o vivienda unifamiliares, sobre todo envolventes, cambio de ventanas o retirada de elementos con amianto, algo que urge en esta zona.
"Torneiros é un dos principais núcleos de poboación do Porriño e hai que acondicionalo para mellorar a calidade de vida das persoas que residen alí. Por iso é unha gran nova para todos e todas", apuntó el alcalde de O Porriño, Alejandro Lorenzo. "Fixemos un proxecto global para a rehabilitación e posta en valor da zona e este é o primeiro paso cara o acondicionamento total. Para conseguilo o Concello aportará fondos e buscará financiación", añade.
Cuantía de las ayudas
En el caso de las viviendas, las ayudas pueden alcanzar el 40% de la inversión, con un máximo de 3.000 euros. Las actuaciones subvencionables incluyen la mejora o rehabilitación del inmueble que deberá obtener un ahorro energético por lo menos del 7%, una reducción en el consumo de Energía primaria no renovable del 30% o adecuar a los requisitos del CTE los elementos de la envolvente.
En el caso de edificios, los beneficiarios serán particulares o comunidades de propietarios, y las ayudas pueden alcanzar el 80% del coste, con un máximo de 18.800 euros por edificio, cuantía que se incrementa en 12.000 euros más en caso de retirada de elementos con amianto.
Las actuaciones están dirigidas a la mejora o rehabilitación del edificio o de vivienda dentro del mismo, sobre todo las tocantes a la cubierta o fachada, y en cualquiera caso, deberán conseguir una reducción del consumo de energía primaria no renovable del 30% y además una reducción de la demanda energética anual global de la calefacción y refrigeración de la vivienda o edificio del 25% o 35%. En el caso de personas en situación de vulnerabilidad económica la ayuda puede alcanzar el 100%.