El Concello de Vigo acelerará al máximo la tramitación administrativa de la futura Biblioteca del Estado en la ciudad para lograr impulsar de forma definitiva el edificio cultural en el entorno de la calle Lalín.
La tramitación “acelerada” de la evaluación ambiental, indispensable para cambiar los usos de los terrenos donde se ubicará y que se pueda por tanto construir el edifico, pasará este martes por el Consello de la Xerencia de Urbanismo. Al recurrir a la tramitación simplificada, que el Concello puede emplear al cumplirse una serie de normativas urbanísticas, de protección ambiental y del paisaje, los plazos se acortarán de forma significativa. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, defiende que se “ahorrará un año” en trámites burocráticos, lo que permitirá ganar tiempo y acelerar uno de los proyectos estrella del regidor vigués.
Con esta medida, se espera que el Plan Especial que permitirá cambiar el uso del suelo a dotacional público pueda ser aprobado por el Pleno en el mes de febrero de 2022, logrando la aprobación definitiva, previsiblemente, antes de septiembre.
“Vamos a gran velocidad y el Gobierno ya empezará a hacer su propia redacción del proyecto”, explicó el regidor vigués para volver a insistir que el ministro de Cultura, Miquel Iceta, “me ratificó la voluntad absoluta del Ministerio” de construir la Biblioteca. Caballero recordó que “Vigo es la más importante ciudad de España sin una Biblioteca Pública del Estado”.
Sobre el nuevo edificio, sin embargo, Caballero confirmó el recorte denunciado por la Xunta de Galicia para situar al nuevo edificio en unos “5.000 metros cuadrados”. Preguntado por Metropolitano.gal, el regidor vigués expresó que “el tamaño es extraordinariamente importante” y aseguró que seguirá “el estándar de la mayor parte de las Bibliotecas del Estado” con un “edificio maravilloso pagado por el Gobierno de España”.
El Gobierno gallego pidió hace un año “replantear” el proyecto ya que, según denunció, el plan de usos inicial contemplaba un edificio de 8.000 metros cuadrados mientras que el Gobierno de España plantearía una construcción de 4.500 metros, similar a la cifra dada hoy por Caballero.
Para la Xunta, realizar el proyecto como lo plantea el Ejecutivo supondrá “hipotecar” a la urbe gallega con una infraestructura cultural que tendrá poco más de 1.000 metros cuadrados más que la Biblioteca Juan Compañel situada en el centro de la ciudad olívica.