El Concello de Vigo reabrirá en los próximos días el pequeño atajo que conectaba Hernán Cortés con Colmeiro Laforet y Simón Bolivar, que se mantiene cerrado al tráfico desde hace algo más de un mes debido a las obras de demolición de un conjunto de edificios para levantar una nueva urbanización. Así lo avanzó este miércoles el regidor vigués, Abel Caballero, en un mensaje de audio enviado a los medios de comunicación.
Según las previsiones municipales, se espera que la reapertura del vial se produzca a lo largo de la próxima semana, entre el 13 y el 19 de mayo, una vez finalicen las actuales obras de demolición que impiden abrir con seguridad el tramo que une ambas calles. En cualquier caso, el Concello todavía no aclara cómo se recuperará la circulación o si habrá algún tipo de restricción.
La conexión entre Hernán Cortés y Colmeiro Laforet será peatonal con seguridad, mientras que se evalúa como permitir el tráfico rodado. "El tráfico de automóviles será muy medido y muy reducido", se limitó a señalar el regidor vigués en el audio, con lo que no es posible realizar preguntas. Este pequeño atajo era muy utilizado tanto para ir desde Urzáiz a Simón Bolívar y Ecuador como para llegar al colegio Compañía de María, ubicado en esa zona. Hay además muchos accesos a garajes.
La constructora ha centrado sus trabajos en el último mes en demoler los pequeños edificios de comienzos del siglo XX, que databan de entre 1900 y 1910 según el Catastro, y que estaban en algunos casos abandonados, mientras que en otros había diferentes negocios como un restaurante, un bar, un quiosco y estanco, una parfarmacia y un local de tatuajes. En el lugar se levantará una nueva promoción inmobiliaria de pisos previsiblemente de alto precio con dos edificios de hasta ocho plantas con 63 viviendas y una nueva plaza planteada inicialmente como área estancial con arbolado y zonas de descanso.