El sueño de tener una senda verde se va cumpliendo poco a poco. Mucho más lento de lo esperado. La irrupción de la estación de Urzáiz y el Centro Comercial Vialia afectó al proyecto inicial. La ampliación del proyecto suponía modificar una actuación demandada durante años por colectivos ciclistas y vecinos de la zona. La nueva vida para las antiguas vías de tren debería esperar. Abel Caballero presentó este martes la segunda fase de esta senda verde, una segunda fase que contará con una inversión que roza los tres millones de euros y cuya previsión es que esté concluida a finales de 2021 o principios de 2022.
El regidor vigués visitó la zona en la que arrancará esta segunda fase de las obra de la vía verde que conectará Urzáiz y Teis, una senda de 3,5 kilómetros y cinco metros de ancho que constarán de un tramo peatonal de dos metros de ancho y otro de tres para el carril bici.
La actuación incluye la reforma de toda la plataforma ferroviaria, el acondicionamiento de áreas de descanso y miradores, así como la instalación de mobiliario, nuevas zonas de descanso con juegos infantiles y parques biosaludables. Además, también se instalará un circuito deportivo para entrenamiento al aire libre, plantaciones de arboles, colocación de bancos, aparcabicis y fuentes.
El Concello mantendrá en esta segunda fase el espíritu ferroviario de la senda verde. Se respetará la señalización, así como tramos de los raíles y otros elementos, mientras que para la seguridad de las usuarias y usuarios se instalará iluminación a lo largo del trazado reconstruyendo la catenaria y con luminarias cada 20 metros.
La senda verde contará también con una pasarela que permita su conexión desde Vía Norte, una rampa desde el paso elevado situado en Buenos Aires. Además, para abrir conexiones en otros puntos de trazado, el Concello procederá a la demolición de los muros de hormigón armado en zonas como Coutadas, Rúa do Xuncal, Camiño da Vía, Camiño da Ferrería, Avenida Galicia, Párroco Don Serafín, Camiño Cascalleira y Camiño das Ánimas.