El Concello de Vigo quiere acabar con los “monumentales disgustos” que suponen las pérdidas de niños y niñas en las playas. “Apartas la vista un minuto y pueden desaparecer”, explicó esta mañana el alcalde, Abel Caballero, quien anunció que el Concello quiere evitar esos malos momentos.
Este año, el Concello repartirá un total de 1.700 pulseras de identificación para niños y niñas. Este identificador contará con el nombre de los pequeños, así como un teléfono de contacto. El objetivo es que, en caso de extravío, el tiempo de contacto con los padres sea el mínimo posible.
Esta campaña busca “dar facilidad para localizar a niños y niñas a la vez que se conciencia de la necesidad de vigilarlos”, aseguró Caballero en rueda de prensa. Las pulseras se podrán solicitar en el Centro Municipal de Emergencias situado en Samil y son totalmente gratuitas.
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Desde 2014, el Concello ha logrado reducir a la mitad el número de menores perdidos en los arenales vigueses. Mientras que en 2014 se perdieron 156 niños y niñas, en 2015 el número descendió a 114 mientras que en 2016 pasó a 90 y en 2017 se rebajó hasta los 77. Este mismo año, hasta el 19 de julio, se perdieron 24 menores, frente a los 31 del mismo periodo de 2017.