El Casco Vello de Vigo es, sin duda, el epicentro del tapeo en la ciudad. Las calles del centro son el mejor lugar para un plan improvisado entre brindis y algo de picoteo. Y ahora, esta zona reforzará su oferta gastronómica con un nuevo local que se presenta como un punto de encuentro entre vinos, tapas y vinilos. Así es SOTA, que abre definitivamente sus puertas este mismo jueves 31 de julio.
Anahí y Javier adelantaron a Metropolitano.gal los primeros detalles de este proyecto, un sueño que ya han presentado a unos pocos amigos en una pre-inauguración privada. Ahora ya tienen todo listo para abrir oficialmente sus puertas en el número 10 de la calle Real, donde antes se encontraba La Consentida.
Esa ubicación, precisamente, sirvió de excusa para bautizar este nuevo local. No podía ser en otro lugar siendo argentinos, con la vinculación que el país tiene con este número. Pero no termina ahí el juego del nombre, porque SOTA también representa los valores del proyecto: Somos Océano Tierra y Aire. Una referencia a la fusión que tendrá su carta entre productos de la tierra gallega, el mar y unos postres casi celestiales.
Vinos, tapas y vinilos
Lo cierto es que estos dos emprendedores argentinos buscan que SOTA sea más que una alternativa gastronómica para Vigo. Con una decoración acogedora, que fusiona elementos naturales como la piedra y la madera con toques modernos, promete ser un dinamizador del barrio. Y eso pretenden lograrlo a través de la música.
"Casa Tinta" era el negocio con el que triunfaron en Buenos Aires, y precisamente se dio a conocer por su amplia propuesta cultural. Con ese mismo espíritu, abre ahora SOTA en pleno Casco Vello de la ciudad para cautivar paladares y corazones de los vigueses y las viguesas. Su espacio incluye un rincón dedicado a su gran pasión, los vinilos. Precisamente este será el corazón del local.
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Entre sus propuestas, será posible encontrar navajas aderezadas con una salsa casera, mejillones, boquerones sobre un pan casero, un tiradito de pescado, tartar o alternativas más contundentes como un chuletón con el clásico chimichurri e, incluso, opciones vegetarianas. Todo en una carta que irá adaptándose por estaciones y productos de mercado y que se complementará con vinos gallegos y argentinos para experimentar. Aunque, para comprobarlo, lo mejor es acercarse a disfrutar de esta propuesta.