Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Vigo-Redondela, pertenecientes a la Brigada de Extranjería, Grupo UCRIF y la Unidad Orgánica de Policía Judicial, Sección de Personas de la Guardia Civil de Pontevedra, y el equipo de Policía Judicial de Cangas, coordinados por la Fiscalía de Pontevedra, Área de Extranjería, han detenido a cuatro personas y han desarticulado una organización criminal dedicada a la explotación sexual, delitos contra los ciudadanos extranjeros y tráfico de drogas en pisos de citas.
La investigación se inicio en febrero de 2022, a raíz del análisis de anuncios de servicios sexuales en distintas páginas web. Durante meses, se han intensificado las investigaciones llegando a localizar y ubicar diversos pisos en varias zonas de la provincia de Pontevedra (Vigo, Pontevedra, Marín, Porriño, Cangas, Sanxenxo), donde se ejercía la prostitución.
La Unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de Pontevedra, durante el trascurso de la investigación recibe una denuncia de una posible víctima de la organización investigada, llegando así a la identificación de nuevas víctimas, declaradas como testigos protegidos, participando activamente en las distintas gestiones practicadas por ambos cuerpos policiales durante los meses que han llevado a cabo esta importante investigación criminal.
Un dispositivo conjunto de Policía Nacional y Guardia Civil, concluye con la detención de tres mujeres, un hombre y un investigado no detenido, a los que se les imputan delitos de prostitución coactiva, pertenencia a organización criminal, delitos contra derechos de los trabajadores, y tráfico de drogas.
Se llevan a cabos varios registros domiciliarios en diferentes localidades, dirigidos por el Juzgado de Instrucción número 2 de Cangas, coordinados a su vez por el titular de la Fiscalía de Pontevedra, Área de Extranjería, y que además de aportar evidencias a los delitos investigados, han conseguido identificar a potenciales víctimas de explotación sexual.
El operativo concluye con la localización de cinco pisos donde se ejercía la prostitución por mujeres extranjeras, quedando precintados por la Autoridad Judicial. Las mujeres prostituidas en los diferentes pisos de citas investigados se encontraban en condiciones abusivas, al estar obligadas a ejercer la prostitución las 24 horas, sin apenas descansos, y a realizar prácticas insalubres, además de incitarlas a consumir sustancias estupefacientes.
En los registros efectuados en los pisos donde se han cometido estos delitos han denotado el volumen de trabajo de estos años, con unos beneficios de más de 700.000 euros.