Un hombre de 30 años de edad se enfrenta a la pena de 10 años de prisión como presunto autor de un delito de agresión sexual, por el que será juzgado este miércoles en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo.
Según se recoge en el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron en mayo de 2022, cuando el procesado tuvo una cita con una chica a la que había conocido un año antes, a través de la aplicación de móvil Tinder.
El acusado la recogió y la llevó a su domicilio familiar en Vigo y, una vez en la vivienda, se sentaron en el sofá del salón mientras veían televisión. En un momento dado, el acusado, "con ánimo libidinoso", comenzó a tocarle la pierna y, de repente, la sujetó por el cuello fuertemente y se puso delante de ella, inmovilizándole las piernas con sus propias piernas, mientras la chica seguía sentada.
El acusado le propinó una fuerte bofetada en la cara y le obligó a mantener sexo oral. Luego le ofreció una toalla para limpiarse y la acompañó de vuelta a su casa.
Por estos hechos, la mujer sufrió diversas lesiones en la faringe y el pecho, además de una reagudización de un trastorno ansioso depresivo y TCA previo. En junio de 2022 el juzgado acordó imponer al procesado la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima.
Delito y penas
El ministerio público lo acusa de un delito de agresión sexual, y pide que sea condenado a 10 años de prisión, y se le imponga la medida de libertad vigilada durante 8 años, además de la obligación de someterse a programas de reeducación sexual.
Igualmente, pide que se prohíba acercarse a la mujer o comunicarse con ella por un tiempo de 12 años y que se inhabilitado para cualquier profesión o actividad que implique contacto con menores, por un tiempo superior en 10 años a la pena de cárcel.