La red de videovigilancia de la Consellería de Medio Rural suma otras 24 cámaras este año en la lucha contra el fuego en 12 localizaciones (tres en cada provincia), por lo que el total de dispositivos se elevan a 177 en 88 emplazamientos de todo el territorio gallego.
Así se recoge en el plan de lucha contra el fuego (Pladiga) para 2024, documento pendiente de ser aprobado en el Consello de la Xunta y al que ha tenido acceso Europa Press.
Esta red se empezó a instalar en 2018 con 88 videocámaras en 44 lugares, cifras que ahora se duplican en 2024. De hecho, la Xunta comienza a sustituir los dispositivos que colocó en un inicio por otros de más prestaciones y con soporte extendido.
Para su instalación, el Gobierno gallego opta por los lugares con alta actividad incendiaria, principalmente parroquias de alto riesgo de incendio (son 40 este año) y zonas de alto riesgo (denominadas ZAR). Permiten detectar fuego y observar la evolución en tiempo real para tomar decisiones.
Los distritos forestales que cuentan con mayor número de cámaras son los ourensanos de Valdeorras-Trives y Verín-Viana, con 18 en cada caso.
Novedades tecnológicas
Entre otras novedades tecnológicas que recoge el Pladiga para este año, la Xunta apunta en su plan que las herramientas de este tipo "cobran cada vez mayor importancia" para combatir el fuego.
Así, se instalarán teléfonos móviles y tablets en las cabinas de los vehículos motobombas, con servicio de la última versión del progama XeoCode Lite para todos los conductores. Permitirá contar con la cartografía de la que dispone el dispositivo, con datos de la geolocalización en tiempo real de todos los incendios, así como acerca de cálculo de rutas, puntos de agua y predicciones meteorológicas.
Paralelamente, continúa la modernización de los Centros de Coordinación de Distrito (CCD) a través de nuevas pantallas profesionales de alta resolución y la instalación de nuevos ordenadores.
Además, se está terminando la dotación de pantallas interactivas en el nuevo centro integral de lucha contra el fuego en Toén (Ourense). Habrá un aula de informática específica para el aprendizaje del software empleado en prevención y extinción de incendios.
Por su parte, en el Pladiga figura que se continuará con el empleo de drones como apoyo a las labores de vigilancia y detección de la actividad incendiaria, además de control de la gestión de biomasa e investigación
También continúa activo el servicio telefónico y gratuito para denunciar de forma anónima presuntas actividades delictuosas incendiarias (900 815 085).