Uno de los grandes clásicos del cine italiano tuvo su particular parelelismo en el barrio vigués de O Calvario. Como si se tratara de la película de Vittorio de Sica, un hombre se llevó a hombros una bicicleta mientras su dueño estaba ausente, aunque no se encontraba pegando carteles de cine sino haciendo la compra. El final de la historia también recuerda a otro film mítico, "Carros de fuego".
Agentes de la Policía Nacional detuvieron a un individuo que fue sorprendido con una bicicleta robada a hombros, todavía con las ruedas encadenadas. Sobre las 17:20 horas de este martes, cuando una patrulla circulaba por Jenaro de la Fuente, en Vigo, fue requerida por un viandante que les informa que acababa de ver a un hombre que llevaba una bicicleta con la rueda candada en volandas por la calle Aragón dirección a la calle Extremadura.
Al presumir que se trababa de una bicicleta robada, proceden a intentar localizar a dicho individuo con la bicicleta y, después recorrer varias calles, localizan al sujeto en la calle Numancia. Los agentes proceden a parar al varón con la bicicleta y al preguntarle sobre la misma y por qué la llevaba a hombros y candada, el varón les dice que "la ha encontrado en la calle".
Inmediatamente, y por las referencias dadas anteriormente por el ciudadano que les informó, los agentes supusieron que la bicicleta pudo haber sido robada en el entorno del supermercado Mercadona del centro comercial Bandeira, por lo que se acercó hasta el lugar otra dotación de policía. Cuando la patrulla llega a la entrada del Mercadona, un ciudadano les informa que dejó su bicicleta con un candado en la puerta para hacer las compras y al salir había desaparecido. Al preguntarle cómo era la bicicleta, los datos coincidían totalmente con la que portaba el varón que la llevaba a hombros.
Cuando se va a proceder a la detención del varón que se había llevado la bicicleta, este da un empujón a los agentes, y huye a la carrera, siendo perseguido a pie por dos policías, y por otros dos en vehículo. El recorrido se alarga por las calles Asturias y Travesía de Vigo, hasta que lo alcanzan en Vía Norte, donde después de “una gran carrera de policías y delincuente” consiguen proceden a su detención.
Una vez en Comisaría se comprobó que el detenido ya tenía 16 detenciones anteriores, por hechos similares al descrito.