Desde el pasado 4 de octubre, el Grupo de Estudos de Arqueoloxía, Antigüidade e Territorio (GEAAT) de la Universidade de Vigo está desarrollando su segunda intervención arqueológica en la isla de Ons. Su objetivo es avanzar en el conocimiento de las relaciones comerciales en época romana de esta isla excavando en una de sus factorías de sala situadas en la playa de Canexol y en el castro o castillo de los Mouros, localizado a pocos metros del primero. La iniciativa se realiza al amparo de un convenio de colaboración firmado con el Parque Nacional Marítimo-Terrestre das Illas Atlánticas de Galicia, de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda de la Xunta de Galicia.
La intervención, que se extenderá durante tres semanas, continúa las tareas de limpieza, registro y sondeos llevadas a cabo por el GEAAT del 5 al 9 abril de este año en el mismo enclave, trabajos realizados entonces en el marco del proyecto de investigación Galtfish y con el apoyo también del Parque Nacional Marítimo-Terrestre das Illas Atlánticas de Galicia. Sobre la importancia de esta segunda intervención arqueológica, sus responsables señalan que “puede ser muy interesante por la información que puede acercarnos sobre las relaciones comerciales que estaban funcionando en el Atlántico desde la Edad de Hierro y en época romana también”. En este sentido destacan el carácter singular del yacimiento, por estar situado en una pequeña isla.
Dos zonas de trabajo
El equipo de la Universidade de Vigo que participa en Ons en esta segunda intervención está formado por cinco personas, siendo Alba Rodríguez la directora de campo y Adolfo Fernández el director del proyecto. Sus trabajos se centran en dos zonas principales. La primera de ellas es en el yacimiento romano de la playa de Canexol. En esta campaña, las y los arqueólogos han previsto finalizar la excavación del pío de sala romana de la playa de Canexol localizado en la intervención de abril, que no se pudo finalizar de excavar por falta de tiempo. Esta estructura, indican desde lo GEAAT, está en un excelente estado de conservación, con casi dos metros de alzado de muro conservado. “En este sondeo, pretendemos agotar los niveles arqueológicos, hasta llegar al fondo del pío. Se recogerán muestras tanto de mortero como de los posibles niveles de abandono del pío, para recoger, de ser posible, restos de ictiofauna que nos permitan determinar que especies se salaban en esta factoría”, señalan. Los restos recogidos serán analizados tanto por personal de la Universidade de Vigo como de otras universidades que colaboran en este proyecto.
La segunda zona de trabajo es el castro o castillo de los Mouros, en el que en la intervención de abril se hizo un sondeo en la que se localizaron estructuras “que pensábamos que podrían estar relacionadas con la parte más baja del castro y que nos llevaron ahora a abrir unas catas en él”. Esta será la primera actuación científica en este yacimiento y desde el GEAAT indican que “pivotará sobre cuatro ejes: limpieza de la vegetación superficial con control arqueológico, prospección con métodos geofísicos y geomagnéticos para determinar las zonas con mayor potencialidad arqueológica, excavación y conservación al final”. El objetivo, señalan, es determinar la potencia arqueológica del yacimiento, conocer su configuración interna y datar su ocupación, apuntando que “ya sabemos que es una ocupación de época romana por los píos de sala”. Además, subrayan las y los arqueólogos de la UVigo, “también nos gustaría recuperar algo de material que nos indique el tipo de relaciones comerciales que tenían: qué, cuando, cómo y por qué existía; se tuvo ocupación anterior, cuál era su propia cultura material, cómo vivían en él, etc”.
Tras la realización de la prospección y en colaboración con la empresa SOT, se seleccionaron dos zonas de excavación en el interior del castro o castillo de los Mouros: una en la posible muralla y otra en la plataforma inferior con el objetivo de exhumar alguna vivienda o estructura. “Se recogerán tanto muestras como cultura material que permitan dilucidar la configuración y datación del yacimiento”, comentan desde lo GEAAT. La primera semana de trabajo de campo, indican sus responsables, ya aportó los primeros resultados, encontrando los dos primeros muros y restos de cultura material, entre los que destacan unas monedas de época romana.