La Guardia Civil detuvo gracias a la colaboración de un agente destinado en Caldas de Reis a un hombre por la presunta comisión de tres delitos contra la seguridad vial. El guardia civil destinado en este municipio pontevedrés dio aviso de que un hombre al que conocía por motivos profesionales estaba circulando con una furgoneta sin permiso de conducción. Lo vio en la N-550 a la altura de Valga en sentido contrario y realizando maniobras bruscas y peligrosas. Además avisaba que el vehículo podría ser robado.
El agente alertó a la Central Operativa de Servicio (COS) de la Comandancia de A Coruña de la incidencia y realizó un cambio de sentido en el primer lugar habilitado, con el objetivo de informar de la posición de esta persona para facilitar su interceptación. Se avisó a las patrullas de servicio en la zona, facilitándoles las indicaciones transmitidas por el agente fuera de servicio.
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Los agentes lograron localizar la furgoneta, pero el conductor ignoró sus indicaciones y emprendió a la fuga. Se inició así un seguimiento del vehículo por diversas carreteras de la provincia de A Coruña , realizando esta persona maniobras extremadamente temerarias, ocupando ambos carriles de circulación. En un momento dado el conductor esgrimió un arma de fuego llegando a apuntar con ella por la ventanilla, tratando de intimidar a los agentes que pretendían parar al vehículo, momento en el que el conductor perdió el control total del vehículo poniendo en riesgo a peatones, ciclistas y otros conductores de la vía por la que circulaba, llegando a circular por la acera.
Durante su periplo, el conductor entró en una estación de servicio a gran velocidad, obligando a un turismo a realizar una maniobra evasiva para evitar una colisión frontal., volviendo a exhibir el arma, continuando su comportamiento peligroso y temerario.
La huida concluyó en el kilómetro 2,200 de la AC-305 en Padrón. El vehículo logró ser interceptado sin riesgo para los demás usuarios, abandonando el conductor el automóvil e iniciando la huida a pie por una finca privada portando el arma. Al final lograron interceptarlo y comprobaron que el arma que portaba era una pistola de aire comprimido que por su apariencia simulaba ser real.
Los agentes procedieron a su detención como presunto autor de tres delitos contra la seguridad vial, conducción temeraria, circular sin tener el permiso de conducir y bajo los efectos de sustancias estupefacientes. Además se procedió a incautarle el arma.