Su nombre es Balmi, se trata de una cría de cachalote a tamaño real y sus órganos están hechos de la basura que acaba en las playas y en el mar de Galicia. Instalado por el festival Vive Nigrán delante de Monte Lourido en Playa América, la escultura busca sensibilizarnos sobre la necesidad de adoptar un modelo de sociedad más sostenible.
Esta peculiar escultura ha sido realizada por el equipo artístico Retoque Retro, asociación sin ánimo de lucro en la defensa del Arte y del Medio Ambiente que presta especial atención al medio marino. La escultura presentada este jueves pesa más de 400 kilos, tiene 5,60 metros de largo y 1,70 metros de alto. Está realizada con residuos plásticos de origen marino y representa una cría de cachalote bautizada como Balmi -por su ubicación en O Val Miñor- que está escuchando música con unos auriculares. Durante tres meses, los miembros de Retoque Retro recorrieron 20 playas gallegas cada semana para recoger basuras y residuos para su construcción. Se han utilizado 200 kilos de basura, el 90% de basura marina y 10% de basura urbana, como algunas botellas y tapones proporcionados por vecinos de la zona. Isa García (bióloga), Javi Serantes (escultor) y Ana Lee (maestra) han unido sus conocimientos y habilidades a través de una conciencia medioambiental y una sensibilidad artística común en este proyecto.
La escultura está realizada a escala real ya que las crías de cachalote miden entre 5 y 6 metros al nacer, pueden alcanzar 18 metros de largo en la edad adulta y tienen dientes, a diferencia de las ballenas. Como curiosidad, los dientes de este bebé cachalote son las puntas de plástico de las sombrillas que se quedan enterradas en la arena. Los auriculares están realizados con capazos de obra, restos de contenedores y cajas de pescado cedidas por las cofradías de pesca de Burela y Malpica. La base es una estructura cuadrangular de hierro encargada al escultor Emile Gireau. El cuerpo está construido con unos 500 palos de bateas, uno de los residuos más habituales en las costas gallegas. También se han utilizado cajas de pescado y verdura, bidones, nasas plásticas y hasta una tabla rota de body board. El recubrimiento en degradado de colores se ha elaborado con botellas, tapones, restos de juguetes y hasta trozos de nasas que han llegado desde EEUU y Canadá hasta nuestras costas.
La instalación de este cachalote en Nigrán se enmarca dentro de la iniciativa Vive Sostenible que el festival busca convertir en "todo un símbolo del compromiso con el entorno y la sostenibilidad" a la vez que resalta "la importancia de la música y la cultura como elementos vertebradores y enriquecedores del territorio". Esta escultura es también un homenaje a las ballenas y a todos los mamíferos marinos que juegan un papel en el mantenimiento de los ecosistemas y del clima y están desapareciendo a pasos agigantados de los océanos. Una de sus mayores amenazas es la ingesta de plásticos y los enredamientos con redes abandonadas.
El próximo sábado 2 de octubre está previsto realizar una última jornada de recogida de residuos en la Praia de Patos, una actividad organizada por el Grupo de Acción Local do sector Pesqueiro Ría de Vigo – A Guarda coincidiendo con la celebración de la Semana Azul. Los interesados en participar en esta actividad podrán inscribirse a través de un formulario en la web del Concello de Nigrán.