Vigo se suma a la cacerolada real al monarca Felipe VI

Publicidad

Los balcones y terrazas siguen convirtiéndose en las plazas de hace unos días. Son ese espacio para manifestarse. El nuevo rol de este habitáculo se consolidó de nuevo a las 20:00 horas con el enésimo homenaje a los sanitarios, una ovación que también es extensible a todas aquellas personas que no pueden quedarse en casa y que luchan contra el virus. Poco después, a las 21:00 horas, fue el momento de la indignación. Decenas de gallegas y gallegos expresaron su repulsa a la opaca fortuna de Juan Carlos I. La hora no era casualiada. La cacerolada real silenciaba el discurso del monarca Felipe VI, unas palabras de apoyo al pueblo para salir de la crisis sanitaria y en las que no hubo ninguna alusión al comportamiento de su padre.

Balaídos, Teis, O Calvario, Florida o la Avenida da Hispanidade fueron algunos de los puntos de Vigo en los que las cacerolas manifestaron este hastío hacia la Casa Real. El principal objetivo es que el Rey Emérito done a la Sanidad los 100 millones que recibió de Arabia Saudí. La reivindicación de muchos, sin embargo, era mucho más extensible. Era la de reclamar un juicio para Juan Carlos I, la expropiación de su patrimonio y la abolición de la monarquía.

La renuncia de Felipe VI a la herencia de su progenitor y a la retirada de la consignación parece que no bastan para una importante parte de la ciudadanía. De momento, el monarca no solo ha heredado la Corona de su padre, sino que también ha heredado la indignación que ha provocado en el pueblo español esos 100 millones de euros que recibió Juan Carlos I de Arabia Saudi.

Tras la intervención del monarca y la cacerolada, el debate se trasladó de nuevo a las redes sociales. Los términos #CaceroladaReal, #coronaciao, #DiscursoDelRey o #VivaElRey reflejaban los diferentes estados de opinión de una sociedad dividida sobre si la monarquía sigue siendo una institución acorde a los tiempos actuales.

Salir de la versión móvil