Lo primero que he de decir es que, lamentablemente, y no sé si por desconocimiento del producto o si por tratar de atraer a cierto público, esta película se está promocionando de manera incorrecta. No es cierto, para nada, que estemos aquí ante una película de terror, aunque el principio pueda sugerir eso y haya un par de momentos concretos de sobresaltos, acompañados por la música adecuada en esos segundos, reforzando el impacto (he de reconocer, por ejemplo, que, a pesar de esperado, prácticamente salté en la butaca del cine con el momento en el que el personaje de Jane está alimentando al mapache que tienen casi a modo de mascota, en ese momento en el ático de la casa, a través de un agujero en el techo, y aparece la mano del padre). Lo que nos encontramos en esta película es un drama familiar, además de un thriller, ya en los momentos finales.
El secreto de Marrowbone es la última súper producción española. Se vuelve a repetir la fórmula que tan bien funcionó, en cuanto a éxito, en películas como Lo imposible o Los otros: equipo técnico español combinado con actores de habla inglesa, buscando su comercialización internacional. Grabada en Asturias, cuenta con Bayona (Un monstruo viene a verme) como productor, tras haber ya unido fuerzas con el aquí director en proyectos como Lo imposible, dirigida por Bayona y guionizada por Sergio.
Sánchez, conocido por ser el guionista de proyectos como El orfanato o Palmeras en la nieve, debuta con esta película como director en el mundo del cine. Se nota su trabajo previo con actores jóvenes, bien caracterizados aquí y con personajes que, a diferencia de lo que ocurre muchas veces en películas protagonizadas por niños, no son planos.
El secreto de Marrowbone, por desgracia, y a falta de un segundo visionado, es un proyecto que no quedará en el recuerdo, simplemente pasable.
La película, a pesar de tener ciertos momentos muy conseguidos, no llega a despegar hasta sus minutos finales. ¿Qué es lo que falla? Pues que a pesar de la presencia del padre (muy bien llevada, eso sí, en todo momento, sin la necesidad de mostrarle ya hasta el final, como una presencia siempre constante que sobrevuela la atmósfera a lo largo de todo el metraje) la película es bastante ramplona hasta llegar a esos últimos momentos. No se termina de saber hasta entonces por dónde quiere tirar, y ninguna de las tramas llega a destacar como para mantenerte enganchado hasta llegar a ese punto. Se deja ver, pero poco más.
Me parecen muy destacados, eso sí, como ya he comentado anteriormente, los minutos finales, en los que se descubre todo el tinglado, a partir del momento en el que se nos vuelve a llevar a la aparición del padre. Magistrales son las escenas intercaladas de Tom Porter descubriendo el secreto que las paredes de la casa ocultan con la lucha de Jack contra su padre y su posterior regreso a la casa para encontrarse con lo peor.
Muy inteligente resulta también el juego con los espejos, siempre rotos, tapados o escondidos, de forma que Jack, consciente de una realidad que no quiere admitir a causa de su enfermedad mental, no pueda verse solo.
El final, a pesar de llevarte directamente a exitosas películas del pasado, como El sexto sentido o Los otros, considero que es, justamente, lo mejor de la película, sin que esos paralelismos lo desmerezcan para nada. La escena final, por cierto, me recordó mucho a algunos de los momentos en los que John Nash ve visiones en Una mente maravillosa, a pesar de la clara diferencia entre el caso del primero (personas que nunca han existido, producto completamente de su imaginación) y el que aquí nos ocupa (sus fallecidos hermanos).
La banda sonora es muy regular, destacando, para mal, por el hecho de meter esas tremendas subidas de volumen tan habituales últimamente, a la par de muchas veces molestas, cuando se pretende asustar al espectador. La fotografía sí es en todo momento muy buena, tanto en exteriores como en interiores, consiguiendo trasladas en todo momento el ambiente opresivo de la casa. El guion, desde el punto de vista de la concordancia y, al menos en un principio, sin darle todavía un segundo visionado, no falla a la hora de buscar incoherencias con el final visto.
Película, en resumen, regular. Ésta, sin embargo, estoy convencido de que gana, y mucho, en posteriores visualizaciones (que a ciencia cierta le daré), tras conocer al final la realidad en la que nos hemos estado moviendo a lo largo de la mayor parte del metraje. El tiempo nos dirá, según vayan apareciendo futuros proyectos de Sergio, si éste termina consiguiendo como director el mismo prestigio que tiene como guionista. Deseamos que así sea.
Ficha técnica de El secreto de Marrowbone
Título: El secreto de Marrowbone
Año: 2017
Duración: 109 minutos
País: España
Director: Sergio G. Sánchez
Guion: Sergio G. Sánchez
Música: Fernando Velázquez
Fotografía: Xavi Giménez
Reparto: George Mackay, Mia Goth, Charlie Heaton, Anya Taylor-Joy, Matthew Stagg, Kyle Soller, Nicola Harrison y Tom Fisher
Género: Thriller
Fecha de estreno en España: 27 de octubre de 2017
Sinopsis: “Cuatro hermanos, temiendo que les separen tras la muerte de su madre, se esconden del mundo en su abandonada granja, un lugar cuyas Viejas parece que esconden un terrible secreto”.