Logan, la película del adiós de Hugh Jackman como Lobezno

Logan supone el adiós de Hugh Jackman como Lobezno. El superhéroe se ha hecho mayor. La película de James Mangold muestra a un personaje completamente vulnerable. Sin poderes. Es el Wolverine más sombrío, más oscuro, incluso recuerda al Batman de Nolan. La cinta, estrenada hace casi un año, competirá el próximo 4 de marzo en los Oscars por lograr el galardón en la categoría a Mejor Guion Adaptado.

(ESTA CRÍTICA PODRÍA CONTENER SPOILERS)

Nos situamos en el futuro, en una Texas situada, cronológicamente, en 2029.

El personaje de Lobezno, muy alejado de su pasado, busca el afrontar sus días finales de vida de la forma más calmada posible. La era de los mutantes ha llegado a su fin; Xavier, con problemas mentales a causa de la edad, está en busca y captura por un violento suceso del pasado (el cual terminó con 600 personas heridas y 7 mutantes muertos, como descubriremos a lo largo de la película, estando su cerebro considerado por el gobierno como arma de destrucción masiva), lo que hace que Logan le tenga encerrado y medicado, con el objetivo de que tal hecho no se vuelva a repetir, aislados en un terreno abandonado en la frontera de México, mientras Logan trabaja como conductor de limusina, con el objetivo de poder seguir comprando los medicamentos que Charles necesita y, eventualmente, conseguir ahorrar lo suficiente como para comprar una pequeña embarcación y “mudarse” al medio del mar, donde nadie pueda ser una molestia para ellos ni ellos lo sean para el resto del mundo. Ambos están acompañados por Caliban, mutante con el poder de detectar a otros de su misma especie, lo que en el pasado usó para ayudar al lado “anti – mutantes”, encargándose de su rastreo para su posterior eliminación, redimiéndose de forma posterior y ayudando a Logan en los cuidados de Charles.

Todo marcha relativamente bien hasta que se produce la aparición en escena de una misteriosa mujer que parece conocer la antigua personalidad de Logan y que comienza a increparlo diciendo que tiene que asumir sus responsabilidades como héroe y proporcionarle su ayuda. Esta aparición vendrá acompañada por la de un hombre que se presenta a sí mismo como perteneciente a una empresa llamada Transigen, diciéndole que se ponga en contacto con él si sabe cómo localizar a la mujer. Ante la incredulidad y el nerviosismo que tales acontecimientos despiertan en Logan, Charles le dice que todo esto está relacionado con la aparición de una nueva mutante, algo que le resulta del todo imposible a nuestro protagonista.

Lo anunciado por Xavier es cierto, pero nosotros todavía no lo sabremos. La mujer, Gabriela, logra ponerse en contacto de nuevo con Logan, y le pide contratar sus servicios como conductor de limusina, “tapadera” para que lleve a la pequeña mutante, Laura, a un refugio en el que, supuestamente, estará a salvo, junto a los últimos mutantes vivos. Tras su negativa inicial, Logan termina cediendo. Las cosas, sin embargo, no saldrán como estaba previsto, pues los matones de la empresa lograrán llegar hasta la mujer antes que Logan, acabando con ella y haciendo a Laura, supuestamente, desaparecer, lo que hará que el antaño Lobezno entre en pánico y se dirija a toda prisa al refugio comentado anteriormente, con el objetivo de escapar todos de allí. Será en ese momento cuando descubra que Laura se las ha arreglado para llegar hasta ellos, descubriendo posteriormente el espectador el potencial de sus poderes, tras la aparición de miembros de la empresa Transigen.

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Descubriremos que dicha organización lleva años con un plan secreto: El desarrollar nuevos mutantes con el objetivo de convertirles en armas. Para alcanzar dicho objetivo, no tendrán ningún problema en saltarse todo tipo de moralidad, experimentando con niños creados explícitamente para ello a los que tienen recluidos, y finalmente decidiendo acabar con la vida de los mismos (siendo Laura una de las supervivientes de dicho proceso), al descubrir que había una forma más directa de alcanzar los resultados que buscan, llamada X-24, a la cual conoceremos más adelante, y que supone un clon mejorado y más joven de nuestro protagonista.

A lo largo de la película presenciaremos la huida de Logan, Charles y Laura, en un intento de llevar a la última al punto en el que se supone que va a estar a salvo, siendo perseguidos por los asesinos miembros de Transigen.

Logan supone una nueva mirada al tema tan presente en los últimos años sobre qué es de un superhéroe una vez han pasado sus días de gloria. A lo largo de este tiempo hemos sido testigos del envejecimiento simultáneo, y paralelo, del propio personaje y del actor que le ha dado vida desde el 2000: Hugh Jackman. Esto se hará patente en pantalla, siendo notorio que los años no han pasado en balde para nuestro héroe, con los problemas típicos de la edad, amoldados a su particular genética.

Estamos ante una película oscura, sombría, seria, que, en muchos momentos, recordará, por cómo está hecha, al Batman de Nolan. Una de las mayores virtudes es el saber conjugar el entretenimiento cinematográfico con la profundidad con la que el largometraje está dotado.

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La película es “sucia”, como podemos ver ya desde las primeras escenas, en las que Logan acaba con la vida de un grupo de matones que le ha robado el coche. No hay pudor alguno a la hora de mostrar sangre, heridas, la violencia vista de una forma cruda, sin ninguna clase de romanticismo, como sí puede ser en otras películas del género, lo que ya de entrada le confiere un punto muy positivo a Logan.

Deadpool demostró en 2016 que es posible el estrenar una película de superhéroes con calificación R sin que ésta sufra un tremendo batacazo de taquilla, y esto lo aprovecha, y mucho, una Logan que no teme a la hora de mostrar la violencia que muchas veces rodea a sus personajes. El propio Hugh Jackman aceptó rebajarse el salario para que la película pudiera tener esta clasificación, no haciendo tan duro, en el aspecto económico, un posible fracaso en cines.

La película se acerca en muchísimos momentos al género del western, en este caso post - apocalíptico, transcurriendo, en muchos momentos, en polvorientas carreteras y en pueblos de mala muerte. Resulta toda una road movie que conjuga drama, acción y violencia, con Logan entrando de lleno en lo que casi podríamos llamar una “aventura familiar”, con el padre que nunca tuvo y la que es su hija, tan impulsiva como lo fue él en su momento, pero todavía con tiempo más que de sobra para encauzarse por el buen camino. Los puntuales momentos cómicos resaltan mucho, de forma positiva, entre tanto pesimismo, a modo de alivio y respiro.

Destacar también una muy buena fotografía, con escenarios muy variados y siempre bien recreados, a lo que acompaña las geniales coreografías en los momentos de lucha, sin abusar de los efectos especiales hechos con CGI, algo que siempre se agradece.

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El reparto, principalmente a la hora de hablar de sus tres protagonistas, resulta más que espectacular. Hugh Jackman está impresionante, despidiéndose de forma maravillosa de uno de los personajes más carismáticos de los últimos años, al mismo tiempo que lo hace el espectador, con el simbólico gesto de Laura dejando sobre su tumba la cruz con la que siempre cargó, la de la única causa a la que siempre permaneció fiel, al final de la película. Dafne Keen, actriz española, hace un trabajo remarcable a lo largo de todo el metraje, representando a Laura, papel muy bien tratado en todo momento, siendo el descubrimiento de la joven sobresaliente, con un brillante futuro por delante. Y Patrick Stewart destaca con su solemne y emotivo papel, dotando al personaje de Charles Xavier de la fragilidad necesaria cuando hace falta y del carácter propio de un líder como él cuando la situación lo requiere.

La personalidad de los personajes resulta creíble y empatizamos en todo momento con ellos. A pesar de las reticencias de Logan, para el espectador se hace más que evidente, a partir de cierto punto, que Laura es su hija, lo que añadirá un punto más de carga dramática a las relaciones entre ambos.

Logan tiene una personalidad propia, siendo mucho más que una película de superhéroes. Este largometraje supone la redención definitiva para Logan, sacrificando su propia vida por un bien mayor. Le vemos sufrir. Las heridas y los golpes ya no curan con la facilidad de antaño. Ejercer el grado de violencia con el que él ha tenido que lidiar tanto tiempo supone, por supuesto, un enorme gasto mental y emocional que aquí vemos muy bien reflejado, y que ha provocado la desaparición de Wolverine por el camino, quedando “sólo” Logan. Asistimos al punto y final del clásico viaje del héroe, diciéndole adiós a un personaje al que hemos acompañado desde el 2000, con Logan consiguiendo, finalmente, la paz que siempre ha deseado.

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Habría que destacar dos momentos realmente chocantes y que llegan al corazón. El primero sería ése en el que X-24, clon mutante sin escrúpulos, fabricado exactamente a imagen y semejanza de Lobezno, acaba con la vida de Charles mientras Logan está fuera, todo delante de Laura, lo que llevará a una de las escenas más duras de todo el metraje, con un Logan destrozado diciéndole de forma desesperada a Xavier, tras llegar a la casa en la que pasaban la noche y ver lo que ha ocurrido, en sus últimos momentos de su vida, que no ha sido él su asesino. El otro sería ése en el que vemos a Logan con un cómic de los X-Men en la mano, en un tremendo juego metanarrativo, gritando que todo lo que aparece en esas historias no son más que gilipolleces, siendo en ese momento presa de la ira más absoluta, buscando el director de la cinta el desmitificar estas publicaciones por completo a través de este recurso.

Laura, aún así, cree en lo que esos cómics cuentan con toda la ilusión del mundo, convencida de que albergan la ubicación del lugar en el que finalmente estará a salvo y la esperanza de que una realidad mejor es posible. Son, sin duda alguna, su mayor esperanza.

El guion, sin embargo, y a pesar del buen retrato que hace de los personajes, no resulta nada del otro mundo. Estamos ante la típica persecución a lo largo y ancho de Estados Unidos en la que el grupo de los buenos escapa del grupo de los malos, con los clichés típicos de tales películas, con paradas en distintos puntos, supuestamente seguros, que terminan con ataque sorpresa por parte de los perseguidores.

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Vemos también fallos puntuales. Que ningún niño, con toda la manipulación ejercida sobre ellos, quiera ser asesino, es, cuanto menos, extraño. Que todas las enfermeras que trabajen ahí estén en contra de lo que se está haciendo, sin ninguna excepción, todavía más. Que cuando decidan acabar con el experimento el método sea asesinando a los niños cual comando de locos armados disparando a todo lo que se mueve, siendo imposible el causar más alboroto, en vez de elegir cualquier otro método, pudiendo, eso sí, Gabriela grabarlo todo con el móvil para que después Logan pueda verlo, no tiene ni pies ni cabeza.

La película resulta, por momentos, demasiado previsible, sin que guarde ninguna sorpresa ni as bajo la manga con el que sorprendernos. Sus más de dos horas de duración pueden llegar a hacerse pesadas por momentos, con un ritmo que, en ocasiones, decae de forma brusca.

El final, eso sí, tras despedirnos de Logan, con la maravillosa The Man Comes Around, de Johnny Cash, que trata sobre el fin del mundo, pone los pelos de punta. Destacar también, como elemento externo a la película propiamente dicha, el cartel promocional de la misma, que me parece de los mejores que he visto en mucho tiempo.

En conclusión, decir que Logan es una película muy irregular. Si bien presenta a un personaje principal muy bien trabajado, al igual que sus dos acompañantes a lo largo de la mayor parte de la aventura, siendo de largo la mejor película de la trilogía protagonizada por el antaño conocido como Lobezno, el ritmo de la misma se hace, por momentos, pesado. No se llega a caer en el aburrimiento, pero resulta demasiado larga y vemos ciertos fallos en el guion que pueden sacarte un poco de la película. Puede que sea el mejor largometraje de los relacionados con los X-Men, pero se queda muy lejos de proyectos hacia los que parece que se intenta encaminar, como podría ser el caso de la trilogía de Batman de Nolan, siendo una película, a grandes rasgos, entretenida y buena dentro del género, pero sin pasar a mayores.

Ficha técnica de Logan

Título original: Logan

Estreno en España: 3 de marzo

Año: 2017

Duración: 135 minutos

País: Estados Unidos

Director: James Mangold

Guion: Scott Frank, James Mangold y Michael Green (Historia: James Mangold)

Música: Marco Beltrami

Fotografía: John Mathieson

Reparto: Hugh Jackman, Patrick Stewart, Dafne Keen, Boyd Holbrook, Stephen Merchant, Elizabeth Rodriguez, Richard E. Grant, Doris Morgado, Han Soto, Julia Holt, Elise Neal y Al Coronel

Género: Thriller. Acción. Drama. Ciencia ficción

Sinopsis: “Sin sus poderes, por primera vez, Wolverine es verdaderamente vulnerable. Después de una vida de dolor y angustia, sin rumbo y perdido en el mundo donde los X-Men son leyenda, su mentor Charles Xavier lo convence para asumir una última misión: proteger a una joven que será la única esperanza para la raza mutante… Tercera y última película protagonizada por Hugh Jackman en el papel de Lobezno.”