El próximo sábado 18 de mayo se cumplen dos años de la muerte del escritor vigués Domingo Villar (1971-2022), autor de 'Ojos de agua' y uno de los escritores gallegos más reconocidos gracias a la traducción de sus libros a varios idiomas, a partir de las versiones originales en gallego y castellano, según recuerda la editorial Ediciones Siruela.
En este segundo aniversario del fallecimiento del autor de novela negra, La 2 de TVE le ha rendido homenaje en el programa 'Página Dos' y Siruela quiere destacar el legado artístico como escritor de Villar, quien fue galardonado en 2022 con el premio Vigués Distinguido por su obra.
Siruela define a Domingo Villar como el "indiscutible rey de la novela negra" que consiguió afianzarse, con solo tres títulos, como uno de los autores de novela negra más destacados y valorados, tanto en el panorama editorial nacional como internacional.
"Inauguró con 'Ojos de agua' la serie protagonizada por el inspector Leo Caldas, uno de los adalides de la novela policíaca en castellano. El segundo título, 'La playa de los ahogados', además de ser adaptado al cine, supuso su consagración como autor de novela negra. Con 'El último barco', atinó sarcasmo y solvencia narrativa para, de nuevo, captar la complicidad del lector", recalca.
La serie ha sido traducida a más de quince idiomas y ha cosechado gran número de premios, entre los que cabe destacar el Novelpol (en dos ocasiones), el Antón Losada Diéguez, el Premio Sintagma, el Premio Brigada 21 o el Frei Martín Sarmiento. También fue declarado Libro del Año de la Federación de Libreros de Galicia, ha sido finalista al Premio Libro del Año del Gremio de Libreros de Madrid, de los Crime Thriller Awards y Dagger International en el Reino Unido, del premio Le Point du Polar Européen en Francia y del Martin Beck que entrega la Academia Sueca de Novela Negra.
Ediciones Siruela destaca que, además de novela, Domingo Villar escribió relatos y una obra de teatro. Subraya que si en 'Algunos cuentos completos' celebraba la vida y la amistad, en 'Síbaris' muestra su total maestría narrativa poniendo en pie una comedia negra, plena de enredo y diversión, con la que alejar al espectador o lector de la rutina diaria.
"Hay quien piensa que la literatura es una revelación o un rapto de inspiración pero, para mí, la literatura es un oficio como pueda ser la lutería o la cerámica. Se trata de disponer de buena materia prima y dedicarle todo el cariño y el tiempo que exija. Yo me pienso cada frase, soy enormemente inseguro y me gusta leer en voz alta todo lo que voy escribiendo", explicaba Villar en una entrevista. Afincado en Madrid por casi 30 años, le gustaba describirse como "un pesimista alegre" y como un "artesano que cuenta historias despacito y que habla de personajes emocionados".