Vigo quiere que la ciudad tenga memoria. Que no olvide su pasado. Abel Caballero puso un ejemplo claro. "Con el paso del tiempo a Peniche se le dejó de llamar Peniche". El nombre original hace años se ha recuperado gracias al colorido mural realizado por Peniche. Por ello, el regidor vigués anunció la creación de un programa para recuperar y poner en valor la nomenclatura de la toponimia.
La actuación, que ya está en marcha, consistirá en la edición de libros por cada parroquia para mostrar los nombres originales, la toponimia que formó parte de ese Vigo que creció durante el siglo pasado hasta convertirse en la principal ciudad de Galicia. Caballero ya mostró las primeras publicaciones de este programa de toponimia y afirmó que "están en redacción Cabral y Zamáns, está iniciado Alcabre y está avanzado Matamá".
El alcalde de la urbe gallega expresó que esta iniciativa, este guiño a la historia, "es la recuperación de una forma de entender la ciudad". Caballero detalló que se han publicado los libros de Coia, Valladares y Freixeiro y explicó que los próximos libros ya contarán con los topónimos georreferenciados.
El regidor vigués apuntó que una de las prioridades en las nomenclaturas es poner nombre de mujeres, pero la segunda es poner en valor los topónimos.