La publicación Tapas Magazine abre ese interesante debate. ¿Cuál es el pueblo más famoso de Galicia? Lo hace, demás, de forma valiente. Mojándose. Su apuesta no es otra que Baiona, el municipio costero de la comarca de O Val Miñor donde podrás disfrutar del mar y de sus playas urbanas, pero también de su patrimonio y, sobre todo, de los rincones de un municipio cargado de historia universal. No obstante, la publicación ha optado en estos festivos de Semana Santa lanzar un guiño a O Grove, otra de las localidades que gozan de un importante atractivo turístico en la provincia de Pontevedra.
La referencia de Tapas Magazine a Baiona es escasa. Principalmente destaca "su murallas y sus calles empedradas" y, al ser una publicación gastronómica, designan al Parador de Baiona como el lugar para poder ir a disfrutar de la mejor gastronomía, una propuesta culinaria donde resaltan "la Empanada del Obrador, el Pulpo a Feira", Zamburiñas a Grella o una selección de quesos gallegos". Sin embargo, Baiona ofrece mucho más que un paseo cargado de historia y una cena inolvidable en el Parador de Baiona. En Metropolitano.gal ofrecemos una serie de argumentos que pueden justificar la designación de Tapas Magazine.
Paseo de Monte Boi
El atractivo de Baiona es incuestionable. Se demuestra los fines de semana en los que acompaña la meteorología, en los que el municipio de la comarca de O Val Miñor recibe a decenas y decenas de visitantes. La villa real posee la magnitud de ser histórica, de ser el lugar que dio la nueva del descubrimiento de América, por aquel entonces denominado como el Nuevo Mundo. Ese acontecimiento ha marcado Baiona, con una Fortaleza de Monterreal que permiten al visitante sentirse en plena Edad Media sin estar inmerso en la Festa da Arribada, la gran fiesta de época del concello.
Uno de los planes que ofrece Baiona es recorrer el Paseo de Monte Boi, el trazado que rodea la Fortaleza y que permite vislumbrar unas espectaculares vistas a las islas Cíes y Estelas, a Panxón y Playa América y a los arenales locales de Cuncheira, Os Frades y Barbeira. Durante el itinerario aparecen varias calas, algunas de ellas con accesos habilitados a través de escalinatas de piedra. El itinerario total de este Paseo es cercano a los dos kilómetros.
Fortaleza Monterreal
La historia dice que el recinto amurallado lleva conviviendo con el mar durante más de 2.000 años y que fue habitado por diferentes civilizados como los romanos, los celtas o los fenicios. Con el paso de los años, la fortaleza se convirtió en la residencia de diferentes gobernadores militares, entre ellos el conde de Gondomar. En 1963, la dictadura lo adquirió para instalar el Parador de Turismo, uno de los sitios más icónicos para comer o pasar un fin de semana en las Rías Baixas.
No obstante, la Fortaleza se puede visitar sin necesidad de quedarse en el Parador. El fin de semana muchos caminantes aprovechan el paseo inicial por Monte Boi para luego adentrarse en el interior del recinto amurallado, donde se puede hacer un recorrido alrededor de la fortaleza oteando su espectacular panorámica y observar las torres que todavía permanecen intactas, la Torre do Reloxo, la Torre da Tenaza y la Torre do Príncipe.
Senderismo
Una de las sendas favoritas del equipo de Metropolitano.gal es la senda da Baíña, una de nuestras primeras propuestas de planes. El paseo se sitúa enfrente la playa de Santa Marta. Al cruzar la carretera que conduce al centro de la localidad del Val Miñor, aparece una pasarela de madera de unos 550 metros que permitirá asistir a todo un espectáculo de agua. El río Baíña se mostrará en todo su esplendor. Diferentes cascadas de agua y saltos de agua se entremezclan con la vegetación de esta pequeña ruta que permitirá disfrutar también de varios molinos, siento solo uno de ellos el que está rehabilitado.
La presencia de los molinos hace que esta preciosa pasarela de madera junto al río Baíña forme parte de “senda verde dos Muíños de Baíña”. Los molinos que irán apareciendo durante el recorrido se bautizaron como molino de la “Villeira”, molino “Vello” -el único que está rehabilitado-, molino “Río Grande” y molino “Calla Gorra”.
El espacio natural posee una vegetación en la que predomina el pico y el eucalipto. Los amantes de las aves tienen en esta senda fluvial por el río Baíña una buena ocasión para avistar aves como el gorrión, el estornino, el petirrojo o el cuervo. Sin embargo, uno de los grandes reclamos de este espacio es que es uno de los tramos de la ruta del “Sendero Fluvial y Litoral” de Baiona, una ruta de 11,4 kilómetros que arranca en la playa de Ribeira y que continúa por el Paseo de Alfonso IX hasta llegar a la playa de Santa Marta, donde empezará a cobrar protagonismo el paseo junto al río Baíña.
Playas
Uno de los argumentos que han convertido a Baiona en uno de los grandes atractivos turísticos de las Rías Baixas son sus playas. Entre sus principales arenales se encuentran Os Frades, A Cuncheira, Barbeira, Ladeira, A Ribeira o Santa Marta. Además de disfrutar de un buen baño, en algunas de ellas, como es el caso de Ladeira, se puede disfrutar con la realización de deportes acuáticos como el surf o el paddle surf.
Virgen de la Roca
Es que posiblemente sea el monumento más icónico de Baiona va camino de cumplir su centenario. Inaugurado en 1930, tiene quince metros de altura. La talla en piedra es obra de Antonio Palacios mientras que la cara y las manos corrió a cargo de Ángel García Díaz. Pero este lugar tiene un encanto especial que trasciende la escultura. Uno de sus principales reclamo está en sus espectaculares vistas.
La corona está rodeada de un halo de azulejos y piedra que descansa sobre los hombros de la figura. El interior del monumento tiene una escalera de caracol que permite subir al barco que la Virgen sostiene en su mano derecha y que, con capacidad para cinco personas, sirve de mirador sobre el océano Atlántico.
Al lado del monumento se levantó más tarde el parque recreativo Mercedes de la Escalera (en honor a Mercedes Ruiz de la Escalera), que cuenta con una gran superficie, un Vía Crucis restaurado en 2014, y bancos y mesas de piedra. Aquí se celebra el último domingo de agosto la popular romería dedicada a la Virgen.
Serra da Groba
Sin el ajetreo y el bullicio de la ciudad, la Serra da Groba es un paraíso natural que se eleva hasta los más de 630 metros del Alto da Gabiñeira.
Situada al sur del municipio y en terrenos pertenecientes a las comunidades de montes vecinales en mano común, resulta un lugar ideal para disfrutar del senderismo, el deporte y otras actividades de ocio. Cuenta con lugares como O Chan da Lagoa, O Cortelliño y O Montouto, desde los que se puede observar la belleza del paisaje de la bahía de Baiona, la Foz do Miñor, la fortaleza de Monte Boi, las islas Estelas y Cíes, la comarca del Val Miñor o las rías que conforman toda la costa atlántica de nuestro país hasta el cabo Fisterra. Una de las acciones puesta en marcha por el Concello de Baiona para poner en valor este espacio son los "safaris gratuitos guiados" en los que los asistentes podrán conocer "in situ" los caballos salvajes que habitan este lugar de naturaleza tan pura.