La isla de A Toxa, en O Grove, es conocida por ser una villa termal mágica. Sus aguas tienen poderes curativos, lo que se ha convertido en un gran atractivo para numerosos turistas que, en la búsqueda de paz y desconexión, se encuentran con un enclave natural maravilloso combinado con hoteles de lujo y balnearios. Sin embargo, sus aguas termales, además de ser curativas, esconden algunos secretos mágicos muy interesantes, sobre todo para los más peques.
En esta pequeña isla de las Rías Baixas habitan los Grobits que, según cuentan, son los hobbits de O Grove. Su propia historia dice que suelen vivir en los más profundo de la aguas termales y que es muy complicado que se dejen ver, aunque a veces salen a jugar entre los pinos. Para que los niños y niñas puedan divertirse tanto como ellos, van dejando troncos de árboles pintados, a modo de pistas, que nos permitirán llegar hasta su aldea, en mitad de la naturaleza, donde descansan después de jugar.
La Aldea de los Grobits es un recinto infantil que, desde 2014, está escondido en el Parque Forestal de A Toxa. Se trata de "uno de los parques más originales y únicos de Galicia" y está inspirado en el universo de "El Señor de los Anillos" de J.R.R. Tolkien, concretamente en Hobbiton, el hogar de los hobbits, al igual que el hotel "Mi tesoro" de Lugo. En esta aldea las casitas son muy pequeñas, están semienterradas y tienen la misma estructura que las viviendas de Hobbiton. Además, los Grobits siempre dejan a disposición de los niños y niñas sus juegos favoritos, por eso en el parque también hay columpios, un balancín, un tobogán o un saltamontes tallados en madera.
Al principio todas las casas estaban cerradas, pero "el parque tuvo tanto éxito que decidimos habilitar una de ellas para que se pudiese entrar", explican desde el Concello de O Grove. Actualmente, se puede conocer La Casita de la Sabiduría por dentro. "Antes de verano queremos que en esta casa hayan libros de madera y también libros reales", nos cuentan los responsables del parque, mientras añaden que "el objetivo es combinar cultura, naturaleza y ocio". La finalidad de esta iniciativa es "fomentar la lectura entre los más pequeños", que se suma al proyecto inicial de la Aldea de los Grobits que pretende "trabajar el trastorno de déficit de la naturaleza, es decir, el poco contacto de los niños y niñas con la naturaleza en lo lugares más urbanitas".
La Aldea de los Grobits está abierta todo el año, es totalmente gratis y es un plan ideal para que los más pequeños se sientan como en un cuento mientras conectan con la naturaleza. Según los datos recaudados por la Oficina de Turismo de O Grove en Google Maps, "más de 30.000 personas acudieron a este parque de forma directa el verano pasado". Además, la Aldea de los Grobits formó parte de algunos itinerarios del programa de turismo interno "Elixe Galicia", de la Xunta de Galicia.
Reserva de burros en la isla de A Toxa
Muy cerca de la Aldea de los Grobits, a aproximadamente 130 metros, se encuentra la reserva natural de burros fariñeiros, que se puso en marcha hace unos años con dos objetivos. Principalmente, busca ayudar a la preservación de la especie que está en el peligro de extinción y también sirve de conmemoración a la novelista Emilia Pardo Bazán que, en 1889, escribió sobre A Toxa y la leyenda del burro enfermo que se curó por bañarse en los fangos termales de la isla.
Los primeros burros de la reserva fueron Emilia y Pardo que, más tarde, tuvieron dos hijas llamadas Bazán y Blanca. Actualmente, hay cinco ejemplares: Emilia y sus hijas y Alfredo y su madre. Alfredo recibió ese nombre en honor a Alfredo Vilas, un abogado coruñés muy vinculado a las aguas termales de A Toxa.