Ocho miradores para disfrutar de la Ría de Vigo desde todas sus perspectivas

Atardecer desde el Campo da Rata en Redondela // JulioConde/iStock

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La ría de Vigo es uno de los grandes tesoros de la primera ciudad de Galicia. No solo por su belleza, por su valor natural, o por constituir un gran espacio de ocio (para deportes náuticos, playas, historia...), sino también por ser uno de los pilares económicos de la urbe. Por ello no sorprende que sea uno de los iconos de nuestra ciudad, fotografiado diariamente por cientos de autóctonos y visitantes.

Lo cierto es que la Ría deja unas instantáneas únicas, con las Islas Cíes coronando siempre una puesta de sol que tiñe de tonos anaranjados y rosas los cielos de los días más despejados del verano. Hacia el lado contrario, el puente de Rande se presenta protagonista del estrecho y permite apreciar la extensión de la ensenada de San Simón. Las bateas, los barcos que cruzan de una orilla a la otra o las grúas del puerto que denotan el carácter industrial de nuestra ciudad forman ya parte del paisaje.

Por todo ello la Ría es también un símbolo de identidad viguesa, del que enorgullecerse y presumir y, por suerte, en el entorno de Vigo existen numerosos puntos desde los que disfrutar de nuestra ría, de sus iconos y secretos. Tanto desde la propia ciudad como desde municipios vecinos que también la sienten suya.

La Ría sin salir del casco urbano

Monte de O Castro

No hay un espacio natural más céntrico ni icónico en Vigo que el monte de O Castro, que constituye un mirador en sí mismo. La gran ventaja con la que juega esta localización es que, al encontrarse justo en medio de la ciudad, en función de la ladera que escojas podrás tener unas panorámicas u otras. O Castro permite una vista lejana hasta las Cíes, con la isla de Toralla y la magnitud del Puerto de Vigo desplegándose en primer plano. También desde aquí se obtienen unas vistas únicas de la zona portuaria de Teis y del monte de A Guía adentrándose en las aguas.

A Guía

Si antes la veíamos desde el centro de Vigo, ahora subimos hasta su ermita para contemplar la Ría desde un punto de vista único. Este monte se adentra en medio de las aguas, por lo que sentirás que observas entre las dos orillas. Su vegetación esconde parte de la estampa, sin embargo se alcanza a ver las islas y el tráfico marítimo que recorre la Ría.

Paseo de Alfonso

El Paseo de Alfonso fue pensado como un mirador desde el primer momento. Fue diseñado por el arquitecto Jenaro de la Fuente y aun hoy supone un balcón único sobre la Ría. Sin duda, las protagonistas de esta vista son las siempre presentes Islas Cíes, pero el entorno portuario bajo nuestros pies proporciona una imagen que nos recuerda el carácter industrial de Vigo. Por la distancia se aprecia cada detalle, cada embarcación. Por el contrario, al encontrarse en la zona más abierta de la ría de Vigo, la otra orilla queda lejana y los barcos que la cruzan se pierden y se hacen pequeños en su trayecto.

Un poco más lejos...

Mirador del Faro de Cíes

Sin salir de Vigo pero cruzando las aguas que nos atañen podremos disfrutar del mirador de O Faro, en la Illa do Medio. Estamos en las Islas Cíes, desde las que se disfruta de unas vistas poco habituales de la Ría. Tras la ruta de más de dos horas desde el puerto vigués, debemos recorrer el largo y a veces tortuoso camino que supera una pronunciada pendiente hasta acceder al mirador del faro, construido entre 1851 y 1853. Desde aquí se puede optar por perder la vista en la inmensidad del Atlántico o bien asomarse al otro lado y disfrutar de la ría de Vigo con la ciudad como telón de fondo.

Faro de Cíes // TURISMO DE GALICIA

Monte O Cepudo

El monte de O Cepudo, en Valladares, con sus más de 500 metros de altitud permite unas vistas espectaculares no solo de la Ría, sino de toda la ciudad y es uno de los puntos favoritos para los que quieren una buena panorámica. Desde él y con la capilla del monte Alba en primer plano, la vista alcanza una perspectiva casi global de toda la urbe. Desde este punto se puede hacer todo un recorrido por el litoral, observando la península de O Morrazo.

El mejor banco del mundo en Cedeira

En el Mirador Campo da Rata (Cedeira, Redondela) se sitúa al conocido "mejor banco del mundo". Esta curiosa y enxebre construcción anclada a la roca da lugar a las vistas más virales sobre la ría de Vigo. Se trata de un mirador de gran calidad que permite recorrer la ría con la mirada en toda su extensión, desde las Cíes hasta más allá de la isla de San Simón. Además, por su cercanía, deja unas vistas nítidas sobre la otra orilla, sobre el Puente de Rande y sobre las bateas que se extienden por nuestras aguas. Puedes encontrar aquí las indicaciones para llegar.

Panorámica desde Cedeira

Mirador de Soutoxuste

El mirador de Soutoxuste - o Alto da Cabaleira - se encuentra en O Viso (Redondela) y desde él se puede observar la ría y todo el despliegue de la ensenada de San Simón. Con la mirada puesta en las Cíes, el absoluto protagonista de la estampa es el Puente de Rande que, en pleno centro de la vista, conecta ambas orillas y deja unas instantáneas especialmente bonitas con la puesta de sol, marcando el contorno de esta construcción a contraluz. Si cambiamos de perspectiva, hacia el otro lado se aprecia también la desembocadura del río Verdugo. La zona cuenta con un merendero equipado con mesas y asadores. Para llegar se desaconseja el GPS, pero es accesible siguiendo la N-550 y tomando el desvío de O Viso para luego continuar por las indicaciones del Camino de Santiago.

Vista del Alto da Cabaleira con Rande al fondo

Mirador Chan de Arquiña

En la parroquia moañesa de Domaio se encuentra un mirado muy peculiar, pues permite ver hasta tres rías desde un mismo punto. Se trata del mirador de Chan de Arquiña, que con sus 600 metros de altura deja unas impactantes vistas de la ría y de la ciudad. Encontraremos Chapela y el monte de A Guía de frente y, hacia la derecha, el puerto y las playas de Vigo. Pero además, en los días despejados, a nuestra ría se suman la de Pontevedra y Arousa. La Comunidad de Montes de Domaio fue la encargada de construir este y otros dos balcones de madera, que están en completa sintonía con el entorno. Puedes conocer más sobre Chan de Arquiña aquí.

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