El Caribe se puede encontrar sin tener que surcar el océano Atlántico, solo basta con pasar el río Miño hacia el sur, cruzar la frontera con Portugal y, en la zona norte del distrito de Braga, en el municipio de Amares, hallaremos el “Lago dos Cisnes Park”, un recinto privado abierto al público durante la primavera y el verano con diversidad de animales, terrazas paradisíacas y un entorno de ensueño.
En la ciudad de Amares, a la ribera del río Cávado se encuentra este lugar denominado como “Lago dos Cisnes Park”, un espacio pensado para toda la familia que embelesa con sus animales, transporta “al otro charco” con su arquitectura tropical y sus zonas de ocio para los más pequeños y descanso para los que no lo son tanto.
Al entrar en este parque, que durante cada invierno se remodela debido a las crecidas del río Cávado que afectan al entorno, se puede encontrar grandes recintos con majestuosos pavos reales , incluso tienen ejemplares alvinos, tortugas, avestruces, cisnes, patos, lechones e incluso caballos, según detallan desde la Cámara Municipal de Amares.
Todo el recinto cuenta con una "arquitectura tropical, en su mayor parte de bambú, y un vegetación colgante y árboles", según detallan desde la cámara municipal de Amares, que trasladan al propio Caribe. Al mismo tiempo, tiene seis diferentes espacios para poder consumir alguno de los productos que se ofertan desde el propio negocio que gestiona esta parte del recinto, el Bamboo & Coconut Bar. Ya sean cócteles, desayunos o parrilladas, el establecimiento permite consumir mientras se disfruta del entorno riberense, sin necesidad de reservas.
Para poder acceder a este pequeño Caribe portugués, es necesario pagar una entrada en los meses de mayor afluencia. Durante mayo, junio, septiembre y octubre, el coste es de dos euros, mientras que los meses de julio y agosto, será de tres euros el precio para las personas mayores de 14 años. En ambos casos este importe se descontará de la consumición realizada en el Bamboo & Coconut Bar.