Una peculiar playa del norte de Portugal fascina a National Geographic

Pasarela para recorrer los molinos // Metropolitano

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La costa atlántica es un paraíso de calas y playas de ensueño, desde el norte de Galicia al último punto de Portugal. Una infinidad de arenales de todo tipo, con infinitos paseos junto a la orilla, pero también con escarpados montes que se desprenden directamente sobre el mar. Con tanta variedad, no es extraño que llamen la atención de tantas personas o, incluso revistas especializadas como National Geographic.



Este es el caso de una de las playas más particulares del norte de Portugal. A menos de 90 minutos de Vigo, este arenal es uno de los lugares más bonitos para una escapada antes de que acabe el verano. No solo por su espectacular vista del mar, sus dunas llenas de vida o sus saludables beneficios, también por un emblema que la hace única.

¿Qué recomienda National Geographic?

La revista National Geographic ha quedado fascinada por la playa de Apúlia, situada en el municipio portugués de Esposende, muy cerca de Póvoa de Barzim. En su reportaje acerca de este entorno natural situado en el Parque Natural del Litoral Norte, la publicación habla de los bellos molinos que retratan el pasado agrícola de esta zona, y ahora decoran este playa aportando una pintoresca estampa.

El océano Atlántico salpica en una orilla en la que hay instalada una pasarela de madera para recorrer estas tradicionales construcciones, que se intercalan entre las dunas del lugar. Lo que antes servía para trabajar el maíz de la zona, ahora ofrece la oportunidad de alojarse en un entorno de ensueño. Todo, para dibujar un precioso recuerdo del verano.

Uno de los molinos junto a la playa // iStock/Luis Pina

Qué más ver

Porque esta escapada bien merece la pena, no solo por su proximidad, sino también por todos los reclamos que ofrece el lugar. La propia revista señala que no todo son molinos en este paraje, también resulta imprescindible disfrutar de la arena blanca de esta playa, y los beneficios de su agua. Esta zona está especialmente yodada, lo que viene bien para la piel. Eso sí, hará falta un pequeño esfuerzo para comprobarlo porque el agua está más fría de lo que suele ser habitual en Galicia. Una de las consecuencias de estar totalmente abierto al océano Atlántico.

National Geographic recomienda mucho más en el reportaje que ha dedicado a este tesoro de Portugal. Y aprovecha para aconsejar a las personas interesadas lugares como los miradores cercanos. Destaca el de San Lorenzo o el de Monte do Faro: "Ofrecen una panorámica única del entorno".



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