Vistas 'top' de la Ribeira Sacra y patrimonio del siglo X se unen en este "dulce" concello de Galicia

Imágenes de Parada de Sil // Parada de Sil

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Una ruta de miradores y patrimonio por un “dulce” concello en plena Ribeira Sacra. Siendo uno de los “secretos mejor guardados de la Galicia interior”, como así lo definen desde el Consorcio de Turismo Ribeira Sacra, este paraje gallego vuelve a ser candidato para formar parte de la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO y, para que disfrutes de sus espectaculares vistas, su patrimonio y su gastronomía, te proponemos una escapada por un pequeño municipio en el corazón del cañón del Sil.

Ya sea por aire, a través de globo aerostático; agua, con las rutas de catamarán que ofrece la Diputación de Lugo; o tierra, con rutas por miradores o pasarelas, existen innumerables maneras de disfrutar de la Ribeira Sacra. En esta escapada, te proponemos un viaje hasta Parada de Sil, un pequeño concello de menos de 600 habitantes en el norte de Ourense con un monasterio del siglo X, el único museo de chocolate de Galicia, una necrópolis de los siglos X-XI y varios miradores para enamorarte de las vistas que ofrece el Cañón del Sil.

Monasterio del siglo X

Monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil // Parada de Sil

La ruta por esta localidad de la comarca de Caldelas comienza en el Monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil. Se trata de un inmueble benedictino, ya en desuso, construido en el siglo X. “Conserva en toda su pureza los elementos arquitectónicos de su primera construcción románica”, destacan desde el Concello, y su enrome y frondoso bosque de castaños te envolverá en la magia que desprende el sitio.

Las visitas a este lugar se pueden hacer de manera libre de 10:00 a 17:00 horas de martes a viernes, mientras que sábados y domingo abren su recinto de 10:00 a 14:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas. La entrada tiene un precio de 2 euros por persona y existen buses lanzaderas para poder llegar a este recóndito paraje a las orillas del río Sil.

Museo de Chocolate

Moldes y envoltorio del chocolate // Parada de Sil

En Parada de Sil se encuentra el “único museo de chocolate de Galicia”, según aseguran desde el Concello. Durante casi un siglo la familia Casares fabricó diferentes tipos de este dulce hasta que cerraron en los años 80. Gracias a la donación de sus máquinas, en el Casa-Museo Fábrica de Chocolate se puede observar el proceso que tenían de creación y, en su tienda, adquirir este postre hecho de manera artesana y siguiendo la receta de la histórica familia.

Las visitas a este museo ubicado en Teimende se pueden hacer los jueves y viernes de 10:00 a 17:00 horas y sábado y domingo de 10:00 a 14:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas. La tarifa general para entrar es de 1 euro por persona, salvo para menores de 14 años, estudiantes y personas con movilidad reducida que es gratis.

Necrópolis de San Víctor

Necrópolis San Víctor // Parada de Sil

Este conjunto arquitectónico formado por los restos de una capilla medieval y una necrópolis con tumbas antropomorfas excavadas en piedra es “uno de los más importantes del noroeste peninsular de los siglos X-XI”, aseguran desde el Concello. Con una capilla de más de 40 sepulturas, sin duda es un lugar que no deja indiferente a nadie. Se pude visitar todos los días y su acceso es exclusivo a pie.

Miradores de Parada de Sil

Miradores en Parada de Sil // Parada de Sil

Si queremos disfrutar de las vistas que ofrece este paraje gallego y los meandros del Sil, este concello de Caldelas ofrece múltiples opciones. Puedes optar por uno de los más populares, “Os Balcóns de Madrid”, a 500 metros de altitud; pero también existe el Mirador de Triguás, donde verás “un compendio de todos los paisajes que contiene la Ribeira Sacra” o el Mirador Pena da Cividade.

Otra opción para disfrutar de las vistas es el Mirador do Picotiño, “uno de los mejores miradores de la Ribeira Sacra desde donde puede contemplarse las impresionantes vistas del Cañol del Sil”, destacan desde el Concello. También se pude visitar el de Cabezoás, frente al meandro conocido como Coto das Boedas, uno de los puntos de mayor profundidad del cañón. Y por último, pero no por ellos menos importante, el de O Xuguiño o Chao de Madeiros, a casi mil metros de altura.

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