Con el objetivo de "encontrar vías de colaboración y trabajo conjunto", el presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Carlos Botana, mantuvo una reunión con la Sociedad Jules Verne. Se trata de una asociación cultural que pone en valor la figura de Julio Verne y que cuenta con más de una veintena de socios en Vigo relacionados con el mundo de la ciencia, la educación, la universidad y la cultura. En la reunión participaron, por parte de Sociedad Jules Verne, su presidente Eduardo Rolland, el catedrático de la Universidad de Vigo, Jesús Souza Troncoso; y el biólogo Julio Astor Camino.
Desde el Puerto de Vigo explican que, en la línea de generación de eventos "puerto-ciudad", que "aporten valor cultural y vinculen la historia del puerto de Vigo con sus ciudadanos", la reunión tenía como finalidad encontrar puntos en común que permitan trabajar de manera conjunta en la divulgación de la cultura marítimo-portuaria de Vigo, así como su relación con Verne.
Durante la reunión, mantenida en la sede de la Autoridad Portuaria de Vigo, los miembros de la Sociedad Verniana, presentaron el V Congreso Mundial Jules Verne que acogerá Vigo en 2028, año del bicentenario del escritor. Avanzan que la colaboración entre el puerto y la sociedad "será muy estrecha" y que "ya están abiertas" varias líneas para la puesta en valor del paso de Verne por Vigo y su impronta novela".
Así mismo, se mostraron las ponencias sobre Vigo y su puerto que la Sociedad Jules Verne presentará en el Congreso Mundial que se celebrará en Cartagena de Indias, en Colombia, el próximo 2024. Dicho congreso ya se celebró en el pasado en otras ciudades como La Habana, Barcelona o Palma de Mallorca.
Cabe recordar que Julio Verne mencionó en su obra a Vigo y su puerto ya antes de conocerlos. Así, el Capitán Nemo nos visita en “20.000 leguas de viaje submarino”, novela en la que el escritor le dedicó todo un capítulo a nuestra ría y su entorno. El escritor francés visitó después, en dos ocasiones, la ciudad olívica atraído, entre otros encantos, por la batalla de Rande y los galeones españoles hundidos en la Ría de Vigo en 1702 cargados de oro y plata. Ría a la que calificó de “verdadero fiordo”.