Después de 15 años (y una pandemia de por medio), la sala viguesa Mondo Club celebra su "redondo" aniversario a lo largo del mes de mayo, con una serie de eventos especiales por los que pasarán más de una treintena de artistas, entre DJ's residentes, invitados locales, de toda Galicia, Madrid, y varios artistas internacionales inéditos en el norte de España. Las entradas están ya a la venta a través de Woutick por 10 euros.
El primero de los eventos programados para "soplar las velas" tuvo lugar el sábado 14 de mayo, con la séptima edición de las fiestas FLUX, comisariadas por los jóvenes artistas vigueses Yugen Kala. En esta ocasión, Flux presentó por vez primera vez en la península al artista londinense de pop experimental MRWIZE, junto a la activista digital Beatrix Weapons, ambos en formato de directo audiovisual. Junto a ellos, estuvieron los ruso-italianos Sha Ru y los miembros del colectivo madrileño Ciénaga Electrónica Frpinkl y Porexpanda, en una noche de marcado contenido experimental y de sonidos de vanguardia.
Otro de los momentos clave de este 15 aniversario, llegará el fin de semana del viernes 20 y sábado 21. El viernes 20, con una nueva FLUX, la "número #8", con la visita del sudafricano DJ Lag, héroe del sonido gqom, un estilo crudo y repetitivo repleto de bajos profundos. Junto a él, estarán Saya, investigadora musical y artista multigénero santiaguesa de origen palestino, y los misteriosos residentes X-FLU.
El sábado 21 llegará el turno del artista inglés Call Super, uno de los nombres más destacados de la electrónica contemporánea europea. Su meticulosa aproximación a la composición musical lo identifica como uno de los nombres recientes más originales y personales de la nueva hornada de músicos y DJ's que dominan los clubes y festivales menos conservadores, gracias también a la intensidad hipnótica de sus DJ sets. Junto a él, los tres residentes de la sala SUB de Mondo: Malaguita, FonKid y Viktor Flores.
Mondo Club nació en 2008, en una sala de la calle Joaquín Loriga que desde los años 70 funcionó como discoteca bajo distintos nombres. A caballo entre el indie y la electrónica en su primera década de vida, en la actualidad, y tras una profunda reforma en 2019, abandera los sonidos de club contemporáneos que trascienden géneros y etiquetas, rastreando el talento emergente y las propuestas arriesgadas y menos acomodadas del cada vez más cambiante panorama de la música de club (o post-club) global.