Miles de personas salen a la calle en Vigo el 1 de mayo para exigir "salarios dignos"

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Pocos lugares hay como Vigo que simbolicen mejor una jornada tan icónica como el Día Internacional del Trabajador. El 1 de mayo, posiblemente algo descafeinado al coincidir con el Día de la Madre, sirvió para llevar a la calle las principales demandas de la lucha obra en un contexto preocupante donde impera la crisis provocada por la pandemia y la invasión rusa en Ucrania . Pese a los contratiempos, los sindicatos han priorizado su mensaje en exigir a los diferentes gobiernos y administraciones "salarios dignos" en la que es una de las grandes demandas para no seguir perdiendo los derechos que generaciones anteriores lograron conquistar.

Las calles del corazón de Vigo acogieron este 1 de mayo tres diferentes movilizaciones. La más madrugadora fue la de la CUT, que partió a las 11:00 horas desde la Praza de Fernando O Católico y que congregó, según datos de la Policía Local, a 300 personas. Poco después, CC.OO. y UGT iniciaban desde el cruce de Vía Norte con Urzáiz su propia manifestación, una marcha encabezada por un autobús de época de Comisiones Obreras y que reunió, según la Policía Local, a 3.000 personas, entre las que se encontraban el alcalde de Vigo, Abel Caballero; la presidenta de la Deputación de Pontevedra, Carmela Silva; el delegado de Zona Franca, David Regades, y otros concelleiros como Elena Espinosa o Rubén Pérez Correa (Marea de Vigo), diputados autonómicos como Gonzalo Caballero o Noelia Otero y diputados en el Congreso como Olga Alonso o Ángeles Marra

Por otro lado, alrededor de 2.500 personas, según la Policía Local, se manifestaron por las calles del centro de Vigo convocadas por la CIG, en el acto central del sindicato nacionalista con motivo de este Primero de Mayo, para exigir políticas públicas que frenen la carestía de la vida y salarios dignos, todo ante el "insuficiente" plan del Gobierno central para paliar los efectos de la guerra de Ucrania, y ante una Xunta que "está más preocupada por la sucesión de Feijóo" que por adoptar medidas para paliar el empobrecimiento de la clase trabajadora.

Así lo ha trasladado el secretario nacional de la CIG, Paulo Carril, minutos antes de participar en la marcha que se celebra en la ciudad olívica, y en la que también participa la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, así como diputados y concelleiros nacionalistas como Xabier Pérez Igrexas.

Carril ha advertido de que son necesarios "profundos cambios" en las políticas públicas para amortiguar los efectos de una crisis que tiene efectos "devastadores" para la mayoría social, y ha recordado que la "emergencia social" en Galicia es previa a la guerra en Ucrania. Por ello, ha criticado que se use el conflicto como "justificación para no hacer otras políticas" o como explicación a unos "altos precios que ya existían antes".

"No vemos que las medidas del plan del respuesta del Gobierno sean suficientes", ha subrayado, y ha hecho un llamamiento a la "conflictividad", especialmente en materia de negociación colectiva, porque la actual carestía de la vida "no puede justificar" ni un pacto de rentas ni un acuerdo estatal de negociación colectiva, que solo profundizarían en la precariedad y el empobrecimiento de la clase trabajadora.

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