El balón no rodará en los campos de fútbol hasta que lo autorice el Gobierno. RFEF y LaLiga han acordado este lunes suspender "sine die" el fútbol profesional. La prórroga del estado de alarma hasta el 11 de abril anulaba las dos siguientes jornadas. Los organismos que dirigen Luis Rubiales y Javier Tebas han decidido ser pragmáticos. El deporte rey en España no volverá hasta que el Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez dé por superada la crisis sanitaria por el coronavirus.
La medida adoptada por la Comisión de Seguimiento prevista en el vigente Convenio de Coordinación RFEF-LaLiga abre varias incógnitas. La más importante reside en la viabilidad de disputar las once jornadas que restan en Primera División. Los clubes son escépticos. El doctor del Celta, García Cota, manifestó la semana pasada del duro peaje que supone para los futbolistas el confinamiento. Por ello, abogaba por realizar una pretemporada no solo para llegar en forma a la recta final del campeonato, sino para prevenir lesiones.
El aplazamiento de La Eurocopa y de la final de la Copa del Rey ayuda a reprogramar los once partidos que restan de Liga, pero la idea de Javier Tebas de intensificar el calendario no convence. Los jugadores no llegaran en su momento de estado físico óptimo en un tramo de la temporada en la que se decidirá qué equipos pierden la categoría, quién logra el pasaporte europeo y quién es el campeón de este torneo golpeado por la crisis del coronavirus.