Tras la reciente apertura de la jamonería extremeña Casa Cerralbo, Príncipe vuelve a estar de inauguración. Empieza la cuenta atrás para que el emblemático edificio Simeón de Vigo goce de una nueva vida. Los bajos del icónico inmueble, que en su día funcionó como almacén de la casa comercial Viuda e Hijos de Simeón García, acogerán un novedoso bar-restaurante. A partir de este fin de semana Cañaveral Lunch & Drinks, con un carácter innovador y una estética inspirada en la naturaleza, revolucionará el corazón de la ciudad olívica ofreciendo una nueva "experiencia de ocio" en la zona.
En mayo del año pasado, Nicolás Rey, responsable del nuevo restaurante vigués, tras competir con otras cuatro propuestas, consiguió hacerse con una de la joyas arquitectónicas de Vigo, en la que finalmente pudo materializar el proyecto en el que llevaba trabajando un tiempo. "Había visto otros locales, pero te llega una oportunidad así y no te lo piensas", explica el responsable haciendo referencia a la importancia y belleza del que es, para él, "el mejor edificio de la ciudad" por sus características y ubicación. Desde hace ocho años Rey puso en marcha una asesoría especializada en emprendimiento y, ahora, apuesta fuertemente por el sector hostelero con Cañaveral porque "hace falta un establecimiento de ocio en la zona". Este nuevo local "es más que un restaurante, es una experiencia para pasarlo bien", asegura.
Bajo la premisa de "cocina para todo el día", la amplia carta de Cañaveral pretende ofrecer alternativas para cualquier franja horaria. Con los desayunos y brunch, esta propuesta quiere ir un paso más allá de lo tradicional con opciones como un bagel neoyorquino de amapola y sésamo con salmón ahumado, queso crema, lonchas de aguacate, hojas de albahaca y aceite de oliva; una tortilla con Nutella, fresa, plátano y miel de maple o, por ejemplo, un brunch con Mimosa o Belini, café, hamburguesa o sándwich con patatas gajo o un waffle o tortita con helado.
Para comer, de lunes a viernes se ofrecerá un menú ejecutivo a un precio de 15,90 euros o platos como hamburguesa de vacuno Mayer con queso Arzúa o tallarines al pesto verde con frutos del mar, entre otros, por un precio que rondarán entre los 12 y los 20 euros. Además, con la propuesta de la carta Internacional también habrá recetas multiculturales de Europa, América, Oriente y Asia. "Nuestra idea es no aburrir, queremos ofrecer una cocina divertida y con mucho rollo", explica Nicolás Rey.
Con opciones como una ensalada de frutas, muesli, yogur eco y frutos secos o una tosta de pan de brioche artesano de ensalada de tomatitos cherry, pesto de nueces y queso Arzúa, entre otros como crepes, gofres, helados o granizados, el Cañaveral también tiene la pretensión de ser una buena alternativa para merendar. "Por las noches queremos que nuestro local sea la primera parada para tomar una copa", explica el responsable. Por eso a su amplia carta de coctelería con opciones como daiquiris, Cosmopolitan, mojitos o margaritas, se sumará una "buena propuesta musical", eventos o monólogos los viernes y sábados, que crearán un ambiente festivo pero "relajado".
Después de casi un año de papeleo y ante la atenta mirada del Sireno, el nuevo restaurante vigués acogerá sus primeros clientes el sábado 19 y el domingo 20 de marzo. Bajo reserva y con un menú cerrado, los más rápidos podrán conocer en primicia la nueva propuesta de Vigo en la preapertura del local, que ofrecerá comidas y cenas. A partir del lunes 21 y hasta el jueves 24 de marzo, continuará el periodo de prueba con la oferta de menús ejecutivos, en dos turnos durante el día. De 13:00 a 14:30 y de 14:30 a 16:00 horas y de 21:00 a 22:30 y de 22:30 a 00:00 horas. Coincidiendo con el inicio de los días grandes de la esperada fiesta de la Reconquista de Vigo, el viernes 25 de marzo será la inauguración oficial de Cañaveral, que ya abrirá con toda su oferta al completo y con un horario desde las 8:00 horas hasta el cierre.
A tan solo unos días de abrir las puertas de esta aventura en la que lleva casi un año trabajando, Nicolás Rey confiesa sentir "muchos nervios", aunque asegura que se enfrenta a este nuevo reto con optimismo por las expectativas que se está generando en la zona por esta nueva apertura. "La demanda existe y la gente está desenado ver y probar cosas nuevas", explica.