El juzgado de lo Penal 2 de Vigo ha condenado a la pena de dos años de cárcel al conductor novel que, en julio de 2023, se salió de su carril en la PO-552 y embistió a una motorista, que falleció en el siniestro, como autor de un delito de homicidio por imprudencia grave.

Según se recoge en la sentencia, ha quedado probado que el chico, que circulaba en el coche de su madre y que había obtenido el permiso de conducir una semana antes, invadió el carril contrario en una recta en la parroquia de Coruxo y a una velocidad de unos 70 km/h, de manera que la motorista que venía en dirección contraria, aunque intentó maniobrar, no pudo evitar la colisión y falleció como consecuencia de las graves heridas sufridas por el impacto.

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La jueza expone en su resolución que el conductor no realizó ninguna maniobra para intentar evitar el choque y que omitió "los más elementales deberes de cuidado", creando "un riesgo grave y evitable".

Además, considera que nada tuvo que ver su tratamiento para el TDAH y que "es inatendible la gratuita manifestación" realizada por el acusado en el juicio, cuando alegó que se había mareado, porque no refirió ni mareo ni pérdida de conocimiento a los testigos, o a los agentes de la Guardia Civil o profesionales sanitarios que lo atendieron instantes después del accidente.

Por todo ello, la magistrada ha resuelto condenarlo a dos años de cárcel y le impone la privación del derecho a conducir durante 4 años. Además, establece que no cabe indemnización complementaria a los padres de la fallecida por perjuicio psicofísico, ya que ya han percibido más de 160.000 euros por parte de la aseguradora del acusado.