El mes de julio arranca este lunes y, con él, el Servizo Galego de Saúde (Sergas) inicia la aplicación de su plan veraniego dotado con 12,5 millones para paliar la falta de profesionales, un problema que se agrava todavía más en esta época con las vacaciones del personal.
Uno de los pilares de la hoja de ruta ideada por la Consellería de Sanidade es el polémico --pero autorizado por el Gobierno central, siempre que sea de forma supervisada-- empleo de médicos internos residentes (MIR) de último curso para cubrir estas vacantes en centros de salud y puntos de atención continuada (PAC). En Galicia, hay en estos momentos un total de 119 MIR en último año de la especialidad de Medicina familiar y Comunitaria, y han aceptado pasar consulta durante el verano 103, lo que alcanza un porcentaje del 86,5%, según datos del Sergas a los que ha tenido acceso Europa Press. En Pediatría, sin embargo, este ofrecimiento no ha tenido el mismo éxito: solo han accedido seis de un total de 26, el 23%.
Por áreas sanitarias, en la de Vigo se han apuntado 21 MIR de Familia, más otros dos de Pediatría. En la de A Coruña-Cee se ha alcanzado una cifra similar con 20 residentes, aunque todos ellos de Medicina de Familia. A estos se suman otros 19 en la de Santiago-Barbanza, también sin participación de pediatras; 15 en Medicina de Familia y uno en Pediatría en la de Lugo-A Mariña-Monforte; 13 y uno en la de Pontevedra-O Salnés; nueve y uno en la de Ourense-Verín-O Barco de Valdeorras; y seis MIR de Medicina de Familia y otro de Pediatría en la de Ferrol.
Una adhesión "muy favorable"
Sanidade considera "muy favorable" la adhesión de los residentes a esta propuesta. De hecho, el titular de este departamento, Antonio Gómez Caamaño, confiaba en días pasados en que la cifra superase la centena.
Por tanto, la Consellería por lo que reconoce y agradece "el esfuerzo y la implicación de esta nueva generación de médicos" que están terminando su formación especializada. Este año, por cierto, finalizan con varios meses de retraso porque fue la promoción que arrancó en un 2020 condicionado por la primera ola de la covid-19; de ahí que la Xunta quisiera contar con ellos antes de que acabasen su formación.
Con todo, el Sergas todavía espera que "a lo largo de las siguientes semanas" se sumen más MIR a esta propuesta por la que cobrarán 2.037 euros al mes por consulta ordinaria en un centro de salud, a lo que se sumarán las cuantías correspondientes a la prolongación de jornada y a las guardias.
Bolsa de médicos para PAC
Otro de los pilares del plan veraniego es la bolsa de médicos voluntarios que estarán localizados para hacer guardias en los PAC. Es una medida que se implantó en el pasado en las áreas con mayores problemas para cubrir vacantes y ahora estará vigente para todo el territorio gallego.
Hasta el momento, según cifras a las que ha tenido acceso Europa Press, se han anotado 111 profesionales pertenecientes a las áreas de Ourense, Pontevedra, Santiago y Vigo. Pero hay que tener en cuenta que las otras tres (A Coruña, Ferrol y Lugo) abrieron recientemente las listas para apuntarse, matiza Sanidade. Los médicos que se quieran sumar a la bolsa podrán ser llamados para atender entre tres y siete días al mes los turnos de PAC que sean necesarios para garantizar la cobertura. Esto se aplicará hasta el 15 de septiembre.
Otra de las medidas del plan veraniego, para la cual todavía no han trascendido cifras, es fomentar la movilidad temporal de los facultativos a través de la figura de los "médicos itinerantes", es decir, los que ejercen en un centro de salud pero que puntualmente se podrán desplazar a otros más tensionados, como los de municipios costeros. En este punto se incluye también la propuesta de que trabajen médicos que dispongan de segundas residencias en zonas de costa que, incluso, podrían ser de otras comunidades autónomas.
La cuarta medida pasa por un programa especial de apoyo en Atención Primaria que realicen los médicos del 061, con el objetivo de que puedan asistir en los PAC de forma voluntaria.