Juan Carlos I ha abandonado la localidad pontevedresa de Sanxenxo, en el que ya es su segundo viaje de este año a Galicia, sin salir a navegar y sin que ningún familiar lo visitase.
Así, minutos después de las 20:00 horas de este domingo, el rey emérito salió de la casa de Pedro Campos en Nanín, sentado en el asiento del copiloto desde el que ha saludado a los medios, en dirección a Vigo.
De esta manera, el padre de Felipe VI puso fin a un viaje atípico en el que no ha salido a navegar ni ha recibido la visita de ningún familiar, ya que normalmente la infanta Elena viene a verlo y aprovecha para disfrutar de la vela.
Además, el rey emérito tampoco ha tenido mucha actividad ya que las dos veces que se ha visto desde que el miércoles llegó a Galicia ha sido durante el fin de semana. Tanto el sábado como el domingo Juan Carlos I ha bajado al puerto deportivo de Sanxenxo donde ha estado hablando con la tripulación del 'Bribón' y otros amigos y conocidos.