El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha anunciado este miércoles que se reeditará el 'bono comercio', una medida de descuento de 30 euros para favorecer el consumo en los establecimientos de proximidad y con la que el Gobierno gallego también aspira a reducir el impacto de la inflación en la economía de las familias.
La cuarta edición de esta medida verá luz verde en la reunión semanal del Ejecutivo autonómico de este jueves y está previsto que el plazo para solicitarlo se abra el 9 de octubre. Fuentes del Gobierno gallego ha concretado que, en las tres ediciones que lleva en marcha esta medida, se descargaron más de 750.000 bonos, con los que se movilizaron 54 millones de euros.
Rueda ha esgrimido que se destinarán 2,5 millones de euros para que los gallegos puedan ahorrar 30 euros en compras en el comercio de la proximidad, y ha reivindicado el compromiso de su Ejecutivo con las familias frente a las críticas de la oposición.
El mandatario autonómico ha esgrimido que esta medida y otras impulsadas por su Gobierno, que ha repasado, como la gratuidad de las escuelas infantiles, tienen "poco que ver con el medio billón de euros" con el que --ha advertido-- se pretende "pagar" a los independentistas catalanes "la investidura" del socialista Pedro Sánchez, contra el que ha llamado "a rebelarse".
Enfrente, la portavoz del BNG, Ana Pontón, y el portavoz parlamentario socialista, Luís López, le han acusado de no adoptar medidas para ayudar a las familias y estar más preocupado "por las necesidades de Madrid que por las del Galicia". Todo ello en medio de un debate muy marcado por la investidura estatal.
Plan del BNG
En este escenario, Pontón ha acusado a Rueda de dejar "tiradas" a las familias ante la crisis de precios mientras que hace "regalos fiscales" a los más ricos; al tiempo que ha insistido en que son los gallegos y gallegas quienes "pagan" la factura de la "sumisión" del presidente gallego "a los intereses" de su partido en el ámbito estatal y a las directrices de Alberto Núñez Feijóo.
Enfrente, ha propuesto un plan con tres patas, que incluya la recuperación de la 'Tarxeta Básica' para la compra de alimentos y medicamentos, hacer compatible la prestación de la renta de integración social Risga con el ingreso mínimo vital (IMV), y el impulso de un fondo de rescate hipotecario para ayudar a las familias pagado en un 75% por la banca.
"Retiran medidas que funcionaban"
También Álvarez ha criticado a la Xunta por "desatender" a las familias y retirar medidas como la 'Tarxeta Básica' u otras que "funcionaban" como la gratuidad de los libros de texto impulsada durante la etapa de gobierno en coalición de PSdeG y BNG.
"Cambiaron el sistema por otro más caro, ineficiente, socialmente injusto e ideológico", ha afeado el portavoz socialista, al tiempo que ha contrapuesto el coste del bono deportivo anunciado por Rueda --que ha elevado a 16 millones-- con la gratuidad de los libros de texto, que supondría, según los socialistas, 18 millones. También ha criticado los pasos fiscales dados por el Ejecutivo autonómico, como la reducción del impuesto de Patrimonio.