El Sindicato de Enfermería, SATSE, ha advertido que el próximo 10 de febrero se inician meses de lucha y reivindicación por parte de las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas en los centros sanitarios y en las calles de todo el Estado para acabar con el "abandono y descalabro de nuestro sistema sanitario" que “solo puede achacarse a aquellos que mandan, pero no cuidan y atienden a las personas”.
Las concentraciones en centros de salud de las capitales de provincia de todo el Estado serán las primeras de sucesivas movilizaciones que el Sindicato de Enfermería mantendrán "sin descanso" durante los próximos meses en todas las comunidades autónomas y que irán aumentando de intensidad con el único objetivo de que las administraciones públicas y los partidos políticos reaccionen, de una vez por todas, y destinen los recursos y medios necesarios a lo que “realmente importa a la ciudadanía”, como es su salud y bienestar general.
La estrategia de movilización permanente diseñada por SATSE, y que se inició ya el pasado mes de septiembre con una protesta publica frente al Congreso de los Diputados, no terminará hasta que haya un compromiso firme por parte de las administraciones de que van a priorizar, en su gestión y presupuestos, la mejora de la atención y cuidados que se presta a más de 47 millones de personas.
“No pararemos hasta ver una firme voluntad de cambio y estamos convencidos de que contaremos con el mayoritario respaldo del conjunto de profesionales de Enfermería y Fisioterapia, a los que volvemos a pedir su presencia activa en todas las acciones reivindicativas y movilizaciones que se irán desarrollando a lo largo de los próximos meses”, apuntan desde la organización sindical.
En el caso de la primera movilización promovida por SATSE el 10 de febrero, el foco se pondrá en el "deterioro progresivo" que ha venido sufriendo la Atención Primaria, y que ha provocado la "grave sobrecarga y saturación" que sufren los centros de salud, con el consiguiente aumento de las esperas y una peor atención y cuidados a los pacientes y ciudadanía, y un empeoramiento de la salud física, psicológica y emocional de sus profesionales.
Asimismo, y al igual que en el resto de próximas movilizaciones, enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas exigirán el desbloqueo en la tramitación parlamentaria de la Ley de Seguridad del Paciente, y que se posibilite la jubilación anticipada voluntaria y que se permita la reclasificación profesional en el grupo A, sin subgrupos, además de acabar con la temporalidad y precariedad laboral que vienen sufriendo desde hace años.
Tras la celebración de las concentraciones en los centros de salud, y antes de que finalice el actual mes de febrero, se convocarán otras en los hospitales de las distintas comunidades autónomas. “Paso a paso, acción tras acción, no cejaremos en nuestro empeño y defenderemos nuestra sanidad y a todos los profesionales, pase lo que pase y le pese a quien le pese”, concluyen desde la organización sindical.