El sargento jefe del Parque de Bomberos de Vigo, José Villar, ha confirmado que el incendio en el edificio de la calle Alfonso X El Sabio, en el que fallecieron cuatro personas, una madre y tres de sus hijos, se inició en la planta baja del inmueble, en las inmediaciones del vestíbulo.
Así lo ha señalado Villar ante los medios de comunicación al asistir a la zona de los hechos para ayudar a los vecinos afectados a recoger sus pertenencias. El bombero ha subrayado que fue a las 04:03 horas de la madrugada cuando los efectivos recibieron la llamada de alerta. "Y a las 04:09 horas estábamos aquí desde la otra punta de la ciudad", ha reivindicado, subrayando que se trata de unos tiempos "más que aceptables".
Sin embargo, tal como ha dicho, el problema radicaba en el propio edificio, que ya era conocido por los bomberos, por lo que preveían un rescate "complicado". Pese a reconocer que el incendio "no fue complicado de apagar", la preocupación se centraba en salvar a los vecinos.
En este sentido, Villar ha explicado que se trataba de un bloque "sin ningún tipo de sistema contra incendios" y que estaba ocupado por muchas familias con niños. "Conocíamos las viviendas. Esto nos hacía prever un rescate complicado", ha indicado, añadiendo que esta situación provocó que se gestionase la salida de los 15 efectivos que, según ha dicho, había en ese momento en la ciudad disponibles.
"Los que conocemos la ciudad y trabajamos en ella tenemos apuntados una serie de inmuebles que nos preocupan. Como profesional, este era uno de los que nos preocupaba", ha reconocido, apuntando sobre todo al "horario nocturno", cuando el edificio estaba "a tope".
Tras informar de que el fuego se inició en el vestíbulo, donde había una moto, bicicletas y enseries varios, Villar no ha querido entrar a valorar si se trató de un incendio intencionado, indicando que tendrá que ser la Policía Científica la que investigue el caso.
Preguntado sobre dónde fueron encontrados los cadáveres de las víctimas, Villar ha informado de que fueron hallados al lado de la puerta de una vivienda del cuarto piso, al igual que dos de los rescatados con vida.
Precisamente esta tarde varios de los supervivientes al incendio han acudido a recoger pertenencias al edificio, ayudados de los bomberos. Villar ha explicado que el protocolo así lo indica, pese que tras la intervención fueron aseguraros los elementos estructurales que se pudiesen caer, como cables de corriente o el agua, para evitar daños a las personas que accedan al inmueble.