Galicia continúa en “meseta” de contagios. Tal y como explicó esta mañana el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, los datos de incidencia en la comunidad se mantienen estables. Ya no se registran las rápidas bajadas de contagios de las últimas semanas, pero por ahora tampoco hay que lamentar subidas incontroladas.
Con todo, la Consellería teme que los casos se disparen sin freno en los concellos gallegos y, por ello, se muestra muy prudente modificando las restricciones en aquellos municipios que registren subidas destacadas en la última semana. Es el caso de Baiona, que el viernes entrará en restricciones altas -lo que en resumen implica que la hostelería solo funcione en terraza- o Cangas, que pasa a nivel medio -con limitaciones de aforo ampliadas con respecto al resto del área-.
Este miércoles, la incidencia acumulada a siete días sigue subiendo en Cangas y se sitúa ya en 90, cuando hace cuatro días era de 41. En los últimos siete días, 24 personas se han contagiado en el municipio morracense. Por el contrario, en Baiona desciende la incidencia, aunque muy ligeramente y pasa de 148 a 140. En el resto del área sanitaria solo sube la incidencia en Moaña, quizá por su intensa relación con Cangas, por lo que la incidencia acumulada se sitúa en 62.
Por su parte, Vigo vuelve a registrar un descenso y sitúa su incidencia acumulada a siete días en 50 casos por 100.000 habitantes De forma global, no hay cambios significativos en el resto de municipios, más allá de las subidas o bajadas habituales y muy ligeras que se producen cada jornada. Está por ver cómo afectará la Semana Santa a unos datos que muestran ya la ralentización en la desescalada.