Precaución en el área sanitaria de Vigo ante el temor de una cuarta ola que dé al traste con la gran evolución epidemiológica de las últimas semanas. Mientras que en Europa se han activado todas las alarmas, con estricto confinamiento en París y una alarma de las autoridades en Alemania, en el área sanitaria viguesa los diferentes municipios no están experimentando todavía subidas notables y el indicador a corto plazo, la incidencia acumulada a siete días, no indica que haya grandes brotes. Con todo, sí hay dos claves que requieren atención. La primera es el frenazo en la disminución de nuevos contagios detectados. Frente a la rápida desescalada de las últimas semanas, cada vez cuesta más reducir los nuevos casos detectados y, aunque en la mayoría de municipios no superan la decena en siete días, está siendo complejo lograr reducirlos a cero. La segunda reflexión nos lleva a comprobar lo rápido que se puede recaer en los contagios y la alta capacidad de transmisión del virus. Desde hace días se están produciendo pequeños repuntes en diferentes concellos que señalan la necesidad de extremar las precauciones y de continuar, por parte del Sergas, con una alta vigilancia sin relajar las medidas preventivas.
Este sábado, la incidencia a siete días da un respiro en Vigo, donde sumaban cuatro jornadas al alza en los nuevos contagios. Se siguen produciendo, de hecho se contabilizan 157 solo en la última semana (IA a 7 días de 53), pero al menos no siguen creciendo cada día más. Sí aumentan en Gondomar, que registra 11 nuevos positivos en una semana (con una IA a 7 días de 75). En As Neves y Crecente vuelven a retroceder y tras dos semanas sin positivos, se vuelven a detectar casos de covid-19.
Este sábado, los datos positivos están en Salvaterra, donde alcanzan la ansiada cifra de cero casos nuevos en una semana. Asimismo, los nuevos positivos también descienden en Redondela, Cangas y Tomiño.