Rastas, un "pirata bueno" y también el James Bond español. Melendi es el agente doble perfecto. Tanto triunfa haciendo de coach en La Voz Kids como lo hace reventando los grandes recintos de conciertos como ha hecho este 17 de agosto en Castrelos. Su fenómeno resurge, y lo hace con una fuerza inmensa. El asturiano incluyó a Vigo en su gira de "Sin noticias de Holanda", un tour que aparecía de forma omnipresente en las pantallas del escenario del auditorio al aire libre vigués. Eso sí, en esa imagen había un spoiler, el hashtag de #VuelveHolanda hacían presagiar que los temas que catapultaron a aquel chico de rastas que llevaba rumba hacia otra dimensión resonarían con más fuerza e intensidad que nunca.

No sorprendió Melendi con los temas del inicio de su concierto en Vigo. El directo comenzó con "El parto", un recital en el que Castrelos registró posiblemente uno de los mejores datos de afluencia de su historia. "Hay más gente que en Aitana", afirmaban los más asiduos al parque vigués. Lo que era una sensación lo confirmaba poco después Abel Caballero, aunque en esta ocasión no se atrevió a dar una cifra de forma pública. "Es el día con más gente de la historia", exclamaba el máximo mandatario municipal ante el júbilo generalizado, una alegría y un éxtasis que llegaba en muchos casos tras varias horas de espera para disfrutar del que se ha convertido en el gran concierto del verano en la urbe gallega.

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¿A qué se debe el fenómeno y la pasión desatada por Melendi? Sinceramente, no creo que en ningún laboratorio o empresa sociológica analice esta pregunta, pero posiblemente las claves sean la nostalgia y ese poder que tiene la música. El asturiano ha recuperado en esta gira de "Sin noticias de Holanda" aquellos éxitos que en 2004 y 2005 formaron parte de la escena nacional. Fueron como una especie de banda sonora, una playlist -en aquellos tiempos no había Spotify ni Instagram- con la que muchos celebraban su llegada a la Universidad, sus fiestas de verano y, también, los malos momentos que nos depara la vida. Porque la vida es eso, evolución. Transformación permanente. Y eso es lo que ha hecho esta noche Melendi en Vigo. Sus temas, que ya son himnos para más de una generación, recobran vida en este tour. El asturiano lo sabe y quiso agradecer la presencia de esos jóvenes "que no habían nacido en 2004".

Esa variedad de generaciones que se dieron cita en Castrelos para disfrutar del concierto de Melendi en Vigo vibró al máximo de cada verso, de cada tema del asturiano, que llegó poco antes de las 18:00 horas al aeropuerto de Peinador dispuesto a salir al escenario con la elegancia y el atrevimiento de James Bond y a convertirse en ese "pirata bueno" que puso a sus pies a un Castrelos que vivió una de sus grandes noches con este "loco" que va "caminando por la vida" haciéndonosla más bonita.

Peleas y crisis de ansiedad por un sitio en la grada

La jornada vivida este sábado en las gradas del anfiteatro no ha sido sencilla. Durante la tarde y a escasos minutos del inicio del concierto, hubo más que una discusión entre los ocupantes de la zona gratuita del Auditorio de Castrelos ante las quejas de que se colaba gente. En algún caso incluso se produjo un ataque de ansiedad ante la intensidad de este intercambio de ocasiones que estuvieron a punto de llegar a la agresión cuando restaban solo unos minutos para que el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, saliera a hacer su presentación habitual del gran evento musical.

Jugadores del Celta, entre los fans de Melendi

Lo avanzó Abel Caballero, pero luego se les pudo ver disfrutando al máximo entre el público. Los jugadores del Celta, Borja Iglesias y Carlos Domínguez, estuvieron antes del concierto compartiendo unas palabras con Melendi, donde le hicieron entrega de una zamarra celeste. Tanto el central como el delantero de la cantera del cuadro vigués vibraron con el directo del artista asturiano, celebrando ese liderato momentáneo del conjunto de Claudio Giráldez, que se encontraba a última hora de la tarde de hoy comandando LaLiga al ser el único que logró ganar en la primera jornada de la competición doméstica tras doblegar por dos goles a uno al Alavés.