Ya es verano en Samil. Con las piscinas destinadas a los más pequeños ya abiertas, el arenal vigués ya está registrando una importante afluencia de bañistas. Cientos de personas aprovecharon durante el festivo del Día del Trabajador el buen tiempo para tomar el sol y darse un baño en una playa que se encuentra en pleno proceso de cambio. El "lavado de cara" se puede apreciar ya en una parte del paseo, donde ya se encuentran instaladas las barandillas que impiden que cualquier usuaria o usuario pueda caer a la zona de la arena. Estas vallas, que tienen un coste de 100.000 euros, ya se encuentran en el tramo más elevado del paseo, en la zona de la playa de Argazada.
La otra transformación está en las piscinas. Actualmente, las tres instalaciones tienen un sistema de agua clorada, algo que implica riesgos de accidente y también la posibilidad de concentración excesiva de cloro debido a la evaporación. Por otra parte, este elemento puede producir un olor desagradable e irritación en algunas partes del cuerpo. Es un tratamiento por electrólisis salina (agua salada) que permite convertir la sal disuelta en el agua en cloro natural mediante una corriente eléctrica. Esto permite eliminar los productos químicos, mejorar la calidad del agua y ahorrar su consumo diario y, además de optimizar la desinfección. Esta mejora supone para el Concello de Vigo una inversión de 53.584 euros.
Las mejoras en la playa de Samil también incluyen la instalación de nuevas duchas, la renovación de losetas del paseo y en los baños. De todas formas, en los servicios todavía queda por implantar arreglos que permitan un correcto funcionamiento para las personas que visiten el arenal vigués.
El otro cambio que podría experimentar la playa de Samil sería la incorporación de una nueva bandera azul. Abel Caballero lo daba por hecho hace unas semanas. El regidor vigués justificaba su optimismo a que el nivel bateriológico del agua de la playa viguesa "es nulo".