Siete de cada diez vigueses desean que Caballero "coopere más" con la Xunta, según una encuesta

Siete de cada diez vigueses están cansados del enfrentamiento político continuado entre Concello y Xunta de Galicia y desean que el gobierno local coopere más con el autonómico. Así se desprende de un sondeo realizado por Sondaxe este mes de febrero al que ha tenido acceso este diario.

Preguntados por si “Abel Caballero debería cooperar más con la Xunta de Galicia”, el 74% de los encuestados respondió afirmativamente, frente al 18,4% que considera que el Gobierno local no debería hacerlo. Un 7,6% no sabe o no contesta.

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La posición favorable al encuentro entre ambos gobiernos es muy deseada entre la práctica totalidad de los votantes sin importar su color político, a excepción de aquellos que en 2019 votaron por Marea de Vigo, los menos proclives a que Caballero busque más cooperación con el Ejecutivo gallego.

Así, el 94,1% de los votantes del PP en las últimas elecciones municipales desean que el Concello de Vigo aligere la tensión con la Xunta, gobernada por el popular Alfonso Rueda. Pero también más de un 71% de los socialistas se encuentran en esta posición, ya que solo un 24,2% de los votantes del PSOE encuestados desean mantener la actual situación de puentes rotos. Entre aquellos que optaron por el BNG, el 70,2% considera oportuno que se rebaje la tensión y que el alcalde coopere más con el gobierno de Galicia.

Entre los datos, sorprende sin embargo la posición de los encuestados que votaron a Marea de Vigo. Solo el 50% de ellos es favorable a que Caballero se abra a pactos con la Xunta. Un 42,6% responde que el alcalde de Vigo no debería "cooperar más”.

Donde no hay diferencias es entre sexo o edad, ya que la amplía mayoría de hombres (74,5) y de mujeres (73,4) desean más cooperación, mientras que en todas las franjas de edad la búsqueda de acuerdo político es ampliamente deseada.

Concello y Xunta mantienen desde hace años una tensión que no se ha resuelto con el cambio al frente del ejecutivo autonómico. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, fue el único de los regidores de las principales ciudades gallegas que se negó a reunirse con el presidente, Alfonso Rueda, tras reemplazar a Alberto Núñez Feijóo. El regidor vigués rechazó que en la reunión estuviera presente la delegada territorial de la Xunta en Vigo, Marta Fernández-Tapias, candidata popular a la Alcaldía. Además, alegó que Rueda declinó aceptar los compromisos que el Gobierno de Vigo le solicitó previamente por carta.