Un grupo de trabajadores de Vitrasa, concesionaria del bus urbano de Vigo, se han concentrado este lunes, convocados por la CIG, frente al Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC) de la ciudad para trasladar su solidaridad con los empleados sancionados y expedientados por la empresa, en el marco del conflicto laboral que mantienen desde hace más de dos años por la negociación del convenio colectivo, y que desembocó en una huelga indefinida desde el pasado 25 de noviembre.
El presidente del comité, Imanol Arnoso (CIG), ha señalado que Vitrasa ejerce la "represión sindical" contra los representantes de los trabajadores, "sobre todo contra la CIG", y ha recordado que la concesionaria sancionó con dos meses de empleo y sueldo a 12 empleados, de los que la mitad son afiliados de este sindicato. A mayores, tres afiliados de la CIG han sido objeto de la apertura de un expediente disciplinario (de un total de 4 expedientados).
"Con estas sanciones y expedientes no se puede negociar un convenio. Igual que la empresa lleva tres años negándose a negociar porque dice que necesita el reequilibrio económico de la concesión, nosotros nos negamos a negociar con estos expedientes sobre la mesa", ha advertido Arnoso.
Asimismo, el representante de la plantilla ha vuelto a tildar de "vergonzosas" las últimas declaraciones de un representante del gobierno municipal, el concejal de Servicios, Javier Pardo, que insistió el pasado viernes en que había intereses políticos tras la huelga, con el fin de "dañar la Navidad y a la gente".
"Parece que viven en una película, en un cuento de Navidad, y los trabajadores somos los malos porque atentamos contra la Navidad. Pero lo cierto es que tenemos un grave problema por culpa de una empresa que solo mira sus cuentas, y que no le importa ni el transporte público ni cómo estamos los trabajadores", ha advertido Imanol Arnoso.
Finalmente, el presidente del comité ha recordado que, en la negociación del convenio, no sólo se han planteado mejoras económicas para la plantilla, sino también mejoras sociales y en el propio servicio. Al respecto ha recordado que Vitrasa "ha suprimido líneas y frecuencias" desde 2020 y que "es necesario recuperarlas".
"Esto no va a parar"
Por su parte, el secretario comarcal de la CIG, Alberte Gonçalves, ha denunciado que Vitrasa "no sabe negociar, lo único que entiende es la represalia". "La CIG no va a dar un paso atrás, vamos a defender a los compañeros", ha señalado, y ha apuntado que, en este conflicto, "hay dos culpables".
Por un lado, una empresa con una "actitud prepotente y chulesca", y por otro, el Concello de Vigo, con un alcalde que, "hasta ahora se lavaba las manos", y que ahora pide negociar para que no se vea afectada la campaña navideña.
Alberte Gonçalves también ha remarcado que el conflicto no se ciñe solo a cuestiones económicas de la plantilla, sino que se han precarizados las condiciones laborales y las del propio servicio, con la péridda de líneas y frecuencias. "Creemos que tiene que haber una solución, que pasa por el diálogo y la negociación, pero no por la represión y el amedrentamiento. Y esto no va a parar, que lo tengan claro", ha sentenciado.