Un tren de borrascas activa el aviso amarillo por lluvia y viento en Galicia

Tras doce días consecutivos de lluvia, las precipitaciones no solo no se irán sino que se intensificarán en las próximas horas. Una sucesión de borrascas protagonizará la situación meteorológica de esta semana que se espera pasada por agua en el conjunto de Galicia.

Según informa la AEMET, hasta el día 14 de febrero (al menos) viviremos un “sucesivo paso de frentes atlánticos” que dejará lluvia especialmente fuerte este martes. La entrada de una profunda borrasca ha activado ya el aviso amarillo en buena parte de la provincia de Pontevedra por lluvia y viento. Desde esta medianoche y hasta las 12:00 horas de mañana se esperan precipitaciones acumuladas de hasta 40 litros por metro cuadrado en 12 horas. Además, el viento se intensificará con rachas que podrán alcanzar los 80 km/hora, aunque se concentrarán principalmente durante la madrugada.

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El miércoles la situación mejorará y solo se mantendrá el aviso amarillo en la costa, donde se esperan olas de hasta cinco metros. Será una jornada de transición en la que es posible que vivamos un paréntesis que dejará cielos nublado o incluso intervalos de nubes y claros durante la mañana, según el pronóstico de Meteogalicia. Con todo, hacia la última hora del día llegará una nueva borrasca que dejará precipitaciones, especialmente persistentes durante la mañana del jueves.

Tras la pausa del miércoles, las lluvias continuarán hasta el viernes, cuando se vivirá una nueva tregua que, con todo, será fugaz ya que el domingo volveremos al paraguas al llegar un nuevo frente.

En cuanto a las temperaturas, se mantendrán estables con horquillas que van de los 7 a los 15 grados en Vigo, mientras que serán ligeramente más suaves en el interior del área metropolitana con valores entre los 6 y los 13 en municipios como Salvaterra.

Enero, frío y húmedo

Galicia vivió un mes de enero muy frío y húmedo debido al paso de sucesivas borrascas, según recoge el último informe climatológico de Meteogalicia, que concluye que el primer mes de 2021 quedó caracterizado por dos partes muy diferentes: las primeras semanas fueron muy frías, pero en general secas; mientras que en la segunda quincena se registró la continua llegada de borrascas, que provocaron lluvias generalizadas, con vientos del sudoeste que ocasionaron un notable ascenso de las temperaturas.

Debido a la presencia de una masa de aire muy fría, las bajas temperaturas alcanzadas en la primera quincena, marcaron el mes. El valor medio de las temperaturas máximas fue de 9.4 º C, alcanzándose los valores más altos en el interior de la península de O Morrazo, con valores próximos a los 14 º C. Las máximas más bajas se dieron en el alta montaña ourensana, principalmente en Pena Trevinca, donde se apenas se llegó a los 0.4 º C.

En relación con la temperatura media de las mínimas, el valor medio se situó en los 2.7 º C, siendo el macizo de Manzaneda y la comarca de A Limia, con temperaturas medias inferiores a los -3 º C, donde se registraron los valores más bajos. Por el contrario, los valores más altos se dieron de forma generalizada en el litoral gallego, con valores próximos a los 8 º C.

Así, la anomalía de la temperatura media para este mes de enero fue de -0.80 º C, lo que hace que el mes pueda considerarse en el conjunto de Galicia como muy frío. Esto se debió principalmente las temperaturas máximas, que fueron muy frías (-1.30 º C), mientras que las mínimas fueron frías (-0.40 º C). La anomalía de este año se igualó a la del 2019, ambas con el precedente más frío en 2006.