La Audiencia Nacional (AN) ha solicitado a la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM) que envíe de forma urgente toda la documentación relativa al pesquero gallego 'Villa de Pitanxo', con el fin de poder coordinar la bajada al pecio.
Así lo ha informado la portavoz de las familias, María José de Pazo, que ha asegurado que el órgano judicial les ha trasladado a todos los personados en la causa un oficio dirigido a la CIAIM para que le envíe de forma urgente dichos documentos, debido a que esta solicitud ya se había realizado hace meses y el ente, perteneciente al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, todavía no ha hecho el envío.
De Pazo ha explicado que será la Audiencia Nacional la que coordine con la empresa adjudicataria de la misión de bajada al barco hundido, ACSM Shipping, las fechas y todo lo relacionado con esta acción. Por ello, es preciso la documentación de la CIAIM.
Desde las familias han mostrado su "desconcierto" por esta falta de traslado de información de la CIAIM al órgano judicial, aunque han mostrado su apoyo a la Audiencia Nacional. "Es de sentido común que el buque tiene que partir con todos los requisitos legales y garantías que vengan estipuladas por ley", ha reivindicado María José de Pazo.
Además, también ha indicado que a día de hoy las familias todavía no tienen constancia de que se haya formalizado el contrato de bajada al pecio, pese a que ya está abierto el plazo para la firma desde este pasado jueves.
Reunión con Besteiro
Ante esta situación, las familias han lamentado también que a día de hoy, casi año y medio después de la tragedia, todavía carecen de un interlocutor interministerial que les informe de los puntos importantes y decisiones sobre el caso.
Por todo ello, han solicitado una reunión con el nuevo delegado del gobierno en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, y le han pedido que les informe si la CIAIM ya ha enviado la documentación a la Audiencia Nacional.
El pesquero gallego 'Villa de Pitanxo' naufragó a 450 kilómetros de la costa de Terranova (Canadá) en febrero de 2022, acabando con la vida de 21 de los 24 marineros a bordo. A partir de ahí, las familias de los fallecidos han iniciado una serie de acciones para tratar de esclarecer los hechos, por lo que siempre han pedido que se bajase al pecio para encontrar pruebas de lo que pudo haber ocurrido.