Una demanda histórica para Bouzas, y por la que los vecinos llevan años esperando, está ya a punto de materializarse. La reforma integral del paseo marítimo de Bouzas comenzará en breve, toda vez que la Xunta de Goberno local ha dado ya el visto bueno a la adjudicación de las obras. La empresa encargada de recuperar el paseo será Civis Global y para ello tendrá un plazo de 11 meses.
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, destacó este jueves que se cumple “lo que Bouzas venía reclamando desde hace décadas” para avanzar un paseo “excepcionalmente importante” que se construirá “en la forma de respeto al mar, a la zona y al arenal”. Las obras tienen un presupuesto de 3,1 millones de euros (2,6 millones sin IVA) y supondrán recuperar medio kilómetro de paseo, regenerar la playa y crear “bancadas” para bajar al arenal en diferentes puntos. Además, incluye la remodelación de las zonas verdes. “Vamos a hacer el espacio que Bouzas requiere y necesita”, aseveró el regidor vigués.
El paseo de Bouzas lleva vallado y cerrado desde agosto de 2018 después de la caída de un hombre debido al mal estado del mismo. Desde entonces, los vecinos se han manifestado periódicamente reclamando que se agilizaran las obras para su reapertura. Finalmente, habrá que esperar más de cuatro años desde su cierre para volver a pisarlo. Las obras tienen un plazo estimado de 11 meses, aunque dado el historial, Caballero reconoce que "las fechas las carga el diablo" y "pueden ser uno o dos meses más" que lo que fija la licitación. En cualquier caso, debería estar finalizado antes de que acabe el próximo año. El largo proceso administrativo ya ha rematado, a falta de la firma, por lo que solo queda iniciar las obras.
Las obras actuarán en una superficie de 7.800 metros cuadrados desde la iglesia de Bouzas hasta el puente de la VG-20. El paseo se realizará fundamentalmente en madera, aunque incluirá también una zona de piedra en su parte más próxima a los edificios y zonas ajardinadas. Para descender a la playa habrá tres escaleras, mientras que en la parte final se creará un graderío escalonado para bajar al mar. “Está copiado de las playas fluviales del Sena”, explicó en junio el regidor vigués.
Cuando se presentó el proyecto, el Gobierno local explicó que la reforma incluirá un reforzado sistema de iluminación que no solo actuará en el propio paseo, sino que se iluminará también las fachadas de los edificios de forma vertical y la lámina acuática. En las zonas más próximas a los locales de restauración se instalarán cinco grandes pérgolas de madera con vegetación al estilo de la Ronda de Don Bosco.