Vigo trasladará su oficina de turismo este mismo año. Aunque en la actualidad y desde hace once años el punto de información turística de la ciudad se encuentra en As Avenidas, en una oficina del Consorcio Zona Franca en la Estación Marítima, el contrato finaliza este mes de septiembre tras una prórroga de un año solicitada en 2020, por lo que hace que sea urgente encontrar una nueva ubicación. El Concello, sin embargo, ha tomado una decisión de calado y trasladará la oficina al epicentro de la ciudad, alejándola de Beiramar donde también se encuentra el punto turístico de la Xunta de Galicia para la ciudad.
El Concello se encuentra ya buscando un emplazamiento nuevo y para ello ha publicado la licitación pública para encontrar un local que se adapte a las necesidades municipales para informar al creciente número de visitantes que recibe la ciudad. El Gobierno local descarta la idea de 2005 cuando el Gobierno de Corina Porro decidió llevar la oficina al quiosco del mirador del Paseo de Alfonso -que ha estado más tiempo abandonado que en uso-.
La nueva propuesta pasa por reubicar las actuales instalaciones desde la Estación Marítima al eje Príncipe-Porta do Sol. Para ello, el Concello busca un local en ambas ubicaciones, aunque no descarta que pueda abrirse en Eduardo Iglesias (entre Príncipe y la calle Progreso) o en López de Neira (entre los números 1 y 5 o del 2 al 12).
El local en el que se instalará la nueva oficina turística de Vigo deberá tener una superficie de al menos 120 metros cuadrados, de los que 100 estarán en la planta baja del local a nivel de calle. El frente mínimo de la fachada será de cuatro metros y el local deberá poder contar con aseo adaptado y contar con unos acabados e instalaciones mínimas que permiten ponerlo en funcionamiento “con pequeñas obras de acondicionamiento”, es decir, el Concello veta los locales lóbregos de obra.
Las nuevas oficinas abrirán en un local en régimen de alquiler, para un periodo de tres años con posibilidad de dos prórrogas anuales. El importe máximo que el Concello podrá pagar es de 5.082 euros mensuales, lo que supone un alquiler anual de 60.000 euros. Es el máximo que permite la ley. Con todo, el Concello estima que para la superficie requerida el precio de mercado se sitúa entre los 4.200 y los 4.800 euros mensuales. La Concellería de Turismo e Xuventude dispone de un local López de Neira 27, una ubicación que el Concello considera que no es céntrica ubicada en una calle con pendiente y que en la actualidad se emplea como almacén de material turístico después de que el Gobierno municipal cerrara las instalaciones que servían como oficina de información para los jóvenes (Punto Xove).
La nueva oficina en el centro de la ciudad se engloba en la estrategia del Gobierno local de reactivación turística pues considera que Vigo “necesita terciarizar su economía, aún industrial mayoritariamente, con el incremento de explotación turística sostenible”. “Aunque hace apenas una década no se concebía a Vigo como destino turístico, en 2016 fue catalogado como zona de gran afluencia turística”, recuerdan desde la Concellería de Turismo, ya que la ciudad registró en ese año más de 623.000 pernoctas. En 2019, solo tres años después, las pernoctas se dispararon hasta registrar 947.521, según los datos del INE. Tras el "crack" turístico de 2020 debido a la pandemia, este verano Vigo está retomando su tirón turístico. Este último puente la ocupación hotelera rozó el 97% en la ciudad.
