Renfe tiene una deuda histórica con Vigo. Más allá de la demora en la implantación de la Alta Velocidad con Madrid, la ciudad olívica y su área metropolitana están carentes de una conexión ferroviaria con Portugal digna del siglo XXI. Otro problema son las averías que sufre el enlace con Barcelona o la escasez de horarios en los trenes que conectan la principal ciudad de Galicia con otros puntos como Santiago de Compostela y A Coruña.
Abel Caballero se reunió esta mañana con el presidente de Renfe. El encuentro con Isaías Táboas se producía para firmar el convenio de colaboración con O Marisquiño. El acuerdo permitirá que las personas que se acerquen hasta Vigo para disfrutar del evento dispongan de tarifas rebajadas. Sin embargo, el regidor vigués quiso tratar con el máximo responsable de Renfe sus propuestas a largo plazo para paliar las necesidades que tiene la urbe gallega en el ámbito ferroviario.
Isaías Táboas manifestaba su cooperación, garantizó que están trabajando en la mejora del servicio de transporte en Vigo, pero rechazó que esos cambios fuesen en el corto plazo. El presidente de Renfe destacó que la empresa tiene un proyecto para remodelar las piezas electrónicas que están ocasiones averías en las locomotoras que operan la línea Vigo-Barcelona. Sobre la mejora de la ruta con A Coruña y la conexión con Oporto habló de una situación de "análisis". "Hay una intención por parte de Renfe de prolongar esos tráficos hasta Oporto".
Por su parte, Abel Caballero recordó que ya está en marcha el estadio del tren de Alta Velocidad que conectará Vigo con Madrid e insiste en no descartar una conexión de las mismas características con Oporto, una ruta que permitiría rebajar el tiempo de viaje con Lisboa, la capital del país vecino.