La venta de entradas para los conciertos de Castrelos están generando un gran interés entre el público y, en consecuencia, la venta de entradas está siendo masiva. Sin embargo, el servicio contratado por el Concello para gestionarla se está encontrando con problemas de caídas web y procesos de carga extremadamente lentos. Ante las quejas generalizadas, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, anunció esta mañana que se ha abierto un arbitraje entre Concello y Ataquilla -la empresa adjudicataria- para “buscar soluciones”.
Ante los problemas registrados para poner a disposición de los usuarios los tickets para el primer concierto de Castrelos, el de Lauryn Hill, Ataquilla se enfrentaba este lunes al segundo proceso de venta. Para hacer frente al mismo, la tiquetera apostó esta vez por aplicar un sistema de cola virtual, que evita las sobrecargas y gestiona a los usuarios permitiéndoles el acceso poco a poco. Sin embargo, Ataquilla no anunció previamente que aplicaría esta opción, por lo que usuarios que se conectaron una hora después de que se pusieran a la venta las entradas se encontraron con esperas de más de una hora y miles de personas por delante de ellos.
Con todo, la cola virtual -habitual en procesos de venta masivos y que generan gran expectación- tampoco permitió librarse de las caídas constantes de los servidores de Ataquilla. Ante estos problemas de infraestructura, Caballero explicó que “no puede ser que paguemos un servicio y que Ataquilla no lo cubra de forma óptima como le exigimos”.
Aunque el regidor vigués consideró que la marca de Afundación “siempre dio muy buen servicio” expresó que “cualquier deficiencia la tienen que resolver inmediatamente”.