Si de algo se presume en Vigo es de las Islas Cíes, el tesoro natural que preside la urbe desde el atlántico. Prácticamente cualquier punto de la ciudad y de su área metropolitana es perfecto para contemplar el archipiélago vigués adornando las Rías Baixas y ofreciendo unas maravillosas vistas, sobre todo al atardecer.
Las conocidas como "Islas de los Dioses" es uno de reclamos turísticos más importantes de Vigo y un destino muy valorado en el panorama internacional. Recientemente, por sus encantos y belleza, la página web de turismo “European Best Destination”, la incluyó, en cuarto lugar, como una de las mejores joyas ocultas de Europa, después de que el periódico "New York Times" las posicionase como uno de los 52 mejores destinos del mundo de 2022.
La Playa de Rodas, conocida como la mejor playa del mundo, y la fascinante ruta del Monte Faro son unas de las visitas obligadas nada más desembarcar en las islas. Pero aunque la caminata hasta el Faro de Cíes sea la más popular, el archipiélago cuenta con varias rutas de senderismo, menos conocidas, que tienen sus propios encantos.
Ruta de Faro do Peito
Una de las zonas menos frecuentadas del Parque Natural Illas Atlánticas es la Isla del Norte, por la que transcurre la Ruta del Faro do Peito, que, aunque no es tan conocida, te permitirá conocer de lleno esta parte del paraíso vigués. Es un recorrido de dificultad media de 2,8 kilómetros (solo de ida), que parte desde la caseta de información, junto a la playa de Rodas, hasta el Faro do Peito o de Monte Agudo, donde te esperarán unas espectaculares vistas de la ría y los característicos acantilados del archipiélago. Por su ubicación, desde este punto, se podrá alcanzar con la mirada la Costa da Vela, O Monte do Facho, Cabo Home y el perfil de las Islas Ons.
El recorrido hasta llegar al faro cuenta con una serie de espacios naturales dignos de hacer una parada. El primero que nos encontraremos será la paradisiaca playa de Figueiras, el arenal nudista por excelencia de Vigo y una de las mejores playas de España según el periódico británico "The Times". Después, el sendero continúa hasta A Valgada, una zona sin vegetación desde donde se pueden ver los acantilados de la cara oeste, y hasta la base del Alto de Monte Agudo que cuenta con un Observatorio de Aves. A partir de aquí tan solo habrá que descender para llegar hasta el Faro do Peito y disfrutar de sus maravillosas vistas.
Esta ruta no se puede dar por terminada sin antes bajar hasta la Furna de Monteagudo, una cueva marina formada por el choque de las olas contra la roca granítica.
Ruta Alto do Príncipe
Esta senda también transcurre por la Isla del Norte y comparte recorrido con la Ruta del Faro do Peito hasta la playa de Figueiras. Solo de ida es un recorrido de 1,7 kilómetros de dificultad baja, que termina en el Alto do Príncipe, la zona más rocosa y abrupta del archipiélago. Es el trayecto más corto y fácil de las Islas Cíes, aunque eso no significa que carezca de encantos.
Después de pasar la playa de Figueiras, el desvío hacía la izquierda nos llevará, en ascenso, hasta el Alto do Príncipe, un lugar privilegiado para disfrutar de unas vistas diferentes del archipiélago, con los acantilados de la costa oeste como protagonistas. Entre las singulares formaciones rocosas de este alto del Monteagudo se encuentra la famosa Silla de la Reina de Cíes, un balcón natural de piedra que se alza sobre el océano.
Ruta del Faro da Porta
Desde la Playa de Rodas y hasta la playa de Nosa Señora, la ruta del Faro da Porta sigue el mismo recorrido que la ruta del Monte Faro. A partir de este arenal, que mira hacia el islote dos Viños y la Isla de San Martiño, la ruta avanza por la costa sur de la Isla del Faro o Isla del Medio hasta el faro da Porta. Este trayecto que, transcurre siempre al lado del mar, es de dificultad baja y cuenta con 2,6 kilómetros solo de ida.
Desde el excelente mirador del Faro da Porta se observa una espectacular panorámica de la Isla de San Martiño o Isla del Sur, los acantilados de Freu da Porta y el Faro de Cíes. Si avanzamos un poco, desde la punta do Canabal se puede divisar el castro de As Hortas, los restos arqueológicos más importantes del archipiélago.
Por último, los más atrevidos tienen la opción de hacer la Ruta entre Faros. Un exigente camino de siete kilómetros, entre el Faro de Cíes y el Faro do Peito, que permite descubrir la gran mayoría de puntos de interés de las Islas de un extremo a otro.