Del 1 al 5 de mayo, Play-Doc, el festival internacional de cine con sede en Tui, celebrará una larga trayectoria que se destaca por haber presentado primeras retrospectivas dedicadas a aclamados cineastas y directores de culto. Pero también, y muy especialmente, por el redescubrimiento de filmografías olvidadas, ignoradas o que hasta ahora han permanecido desconocidas en la historia del cine universal.
Los legendarios Albert Maysles, Charles Burnett, Artavazd Pelechian, Bette Gordon o Kidlat Tahimik, entre muchos otros, han acudido a la histórica localidad gallega para presentar sus películas en persona a una audiencia amplia, entusiasta y diversa. Asimismo este festival independiente ha reivindicado la obra de nombres como Danny Lyon, Nicolás Guillén Landrián, Ozualdo R. Candeias, Aravindan Govindan o Luigi Di Gianni. Destacan también la primera presentación mundial de la obra restaurada de cineastas tan particulares como António Campos o la presentación internacional de las primeras imágenes filmadas por la celebrada Chantal Akerman.
Este interés por intentar reajustar, compensar y expandir la historia del cine se compagina cada año con una selección curada de películas que representan las nuevas tendencias del cine más contemporáneo, con especial énfasis en el cine gallego. Además, Play-Doc también organiza seminarios, clases magistrales, conciertos de música en directo, sesiones de cine expandido o exposiciones de arte, y cuenta también con actividades de industria como la nueva plataforma de formación profesional, desarrollo de proyectos y foro de coproducción internacional "Ventura".
En esta nueva edición, Play-Doc ofrecerá una programación coherente con su singular carácter y también con su evolución a lo largo de todos estos años, en la que abundan las presentaciones inéditas y los descubrimientos. Como avance de la programación, que se irá desvelando en las próximas semanas, Play-Doc anuncia una retrospectiva dedicada a William Friedkin (1935-2023), uno de los realizadores más influyentes de todos los tiempos y autor de algunas de las películas más emblemáticas del cine contemporáneo, cuyos orígenes como cineasta estuvieron ligados al cine documental.
William Friedkin: en la intersección entre la realidad y la ficción
William Friedkin ha mostrado un interés constante en el poder del documental como forma de expresión cinematográfica. A lo largo de su carrera, Friedkin ha explorado la intersección entre la realidad y la ficción, desafiando los límites convencionales del cine narrativo. Su enfoque en el realismo y la autenticidad se refleja tanto en sus películas de ficción como en sus incursiones en el documental, en películas como The People v. Paul Crump, The Bold Men y Mayhem on a Sunday Afternoon, que dirigió a principios de los años 60.
En esos films Friedkin abordó el documental con la misma intensidad y atención al detalle que llevaría luego a su trabajo en la dirección de largometrajes de ficción, utilizando esta forma artística para investigar temas sociales, explorar la condición humana y desafiar las percepciones del espectador sobre la verdad y la realidad.
El recorrido por la filmografía de Friedkin –que falleció el 7 de agosto de 2023– comienza con The French Connection de 1971, una obra que redefinió el relato policial y estableció un tono seco, duro y realista para el género en la década del los 70. Continúa luego con The Exorcist de 1973, una película que trascendió el género de terror para convertirse en un icono cultural, explorando temas de fe y posesión de una manera que sigue resonando en la audiencia hasta la actualidad.
La retrospectiva también incluye a Sorcerer de 1977, una odisea épica de supervivencia y redención que muestra la habilidad de Friedkin para crear tensión visceral con elementos puramente cinematográficos. En Cruising, de 1980, el director se adentra en el submundo oscuro de Nueva York con una película polémica que explora las zonas más perturbadoras de la psique humana.
To Live and Die in L.A. de 1985, en tanto, continúa el recorrido por lo mejor de su obra. Se trata de un retrato sin concesiones centrado en la corrupción y la obsesión. Para cerrar se verá el documental Conversation with Fritz Lang, de 1975, que ofrece una ventana fascinante al mundo creativo del legendario cineasta alemán visto a través de los ojos expertos de Friedkin.
Como un evento especial dentro de la retrospectiva se proyectará The Exorcist en una histórica iglesia de Tui. Esta elección añade una capa adicional de atmósfera a la experiencia y refleja la profundidad temática y espiritual de la película, ofreciendo a los espectadores una oportunidad para sumergirse en su intensidad y su misterio en un entorno excepcional. Play-Doc anunciará la totalidad de su programación en las próximas semanas.